Piden 117 años de cárcel por traer speed líquido de Holanda

F.L.D.
-

La Policía Nacional aprehendió, por primera vez en España, 45 kilos de aceite de anfetamina que la banda ocultaba en botellas de fertilizante

Los agentes se incautaron de medio centenar de botellas.

A la Brigada de Estupefacientes de la Comisaría Provincial de Burgos le costó más de medio año desarticular a la que consideraban una de las mayores redes del tráfico de speed en el norte de España. Un entramado que importaba aceite de anfetamina desde Holanda, país de procedencia de dos de los cabecillas, para convertirlo en droga que posteriormente distribuían por diferentes provincias. Los nueve implicados se sentarán a principios de abril en el banquillo de la Audiencia Provincial acusados de los delitos de tráfico de sustancias y daño grave a la salud. El Ministerio Fiscal pide en total 117 años de cárcel, 15 para tres de ellos y 12 para los otros seis.

Según el escrito de acusación pública, en la cúspide de esta organización se encontraban D.J.K., ciudadano holandés con residencia en el norte de la provincia, su hijo D.F.J.K. e I.B.M., quien a su vez distribuía la droga entre otros de los implicados para que la vendiesen por todo el país. Era importante también el papel de R.L.L., que era el encargado de transformar en un laboratorio el sulfato de anfetamina en speed. 

La Policía Nacional estableció un dispositivo de seguimiento y de control de llamadas a través del cual consiguieron conocer cuál era el papel de cada uno de los individuos dentro de la banda y cómo transportaban la anfetamina líquida desde los Países Bajos hasta España. Tras meses de investigaciones, sorprendieron en Barakaldo a tres de ellos descargando cajas con botellas de fertilizante para plantas. Tras incautarse de todos los envases y analizarlos, comprobaron que se trataba de 45 kilos de aceite de anfetamina con una pureza superior al 60%. 

Los investigadores solicitaron la entrada en los domicilios de todos los narcotraficantes en Burgos, Cuenca, Alicante, Madrid y Bilbao, donde encontraron más droga, concretamente cocaína y cannabis, y dinero en metálico. Además de los 117 años de cárcel, el Ministerio Público pide una multa de cuatro millones de euros para toda la banda.