La campaña de rebajas mejora las ventas de 2021

B.G.R.
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La FEC considera que los buenos datos obedecen a una reducción de los márgenes empresariales

La campaña de ofertas comenzó a finales de junio. - Foto: Luis López Araico

La campaña de rebajas de verano finalizó oficialmente ayer, aunque la mayoría de las tiendas, sobre todo las del equipamiento de la persona, ya llevan días mostrando en sus escaparates las prendas de la temporada de otoño e invierno. Los comerciantes realizan un balance más o menos positivo respecto a este periodo de descuentos, aunque coinciden en que, en líneas generales, ha sido mejor que el de 2021 pero sin llegar a los niveles de ventas alcanzados antes de la covid.

Tras un arranque favorable, las sucesivas olas de calor frenaron el movimiento de clientes en julio, sin que la situación haya remontado, según asegura el vicepresidente de la Federación de Empresarios de Comercio (FEC), Julián Vesga, quien añade que el textil y el calzado es el subsector «más golpeado» por la pandemia. «Hay actividades que ya se han reactivado», precisa, poniendo como ejemplo la informática o la construcción.

Vesga reconoce que la campaña «no ha sido como se esperaba inicialmente», aunque sostiene que ha habido negocios con «buenas ventas» a costa de reducir sus márgenes económicos. La misma visión comparte la presidenta de la asociación Zona G (Gamonal), Victoria Vélez, quien percibe descuentos más agresivos que los de años anteriores. «Si quieres vender en agosto tienes que tirar los precios para dar salida al estocaje», afirma.

La agrupación de empresarios del centro histórico y la zona sur (Centro Burgos) mantiene una percepción más optimista del periodo de descuentos, descontando las jornadas de extremo calor en las que las ventas se paralizaban. Su presidente, Raúl Martínez, asegura que, aunque no se ha llegado a los niveles de 2019, el sector se encuentra muy cerca de ellos. «Ya estamos en unas cifras decentes para poder salir adelante», remarca, sin compartir que las ofertas hayan sido superiores a las de pasadas campañas, sino que más bien lo contrario. En esta valoración, destaca que la presencia de turistas ha incentivado el consumo en algunas tiendas, mientras que Vesga considera que no se ha notado el impacto deseado de este colectivo y sí la salida vacacional de los burgaleses. 

De cara a la próxima temporada, la cautela es la palabra que más se repite. La FEC habla de incertidumbre por una inflación disparada que los empresarios notan desde hace tiempo en las tarifas de sus proveedores. La situación provoca que el colectivo «no está para afrontar más gastos», en referencia al plan de ahorro energético que obliga, entre otras medidas, a la instalación de puertas automáticas.

La prudencia impera a la hora de comprar género, intentando no repercutir la inflación en los precios para que «haya movimiento y un poco de consumo», tal y como explica Vélez, quien muestra su malestar por que la nueva campaña de bonos al consumo del Ayuntamiento se haya retrasado hasta octubre y ya no coincida con la vuelta al cole: «Era nuestra esperanza para arrancar la temporada. No necesitamos vales en Navidad».