La zona pública de Vadillos se arreglará a petición vecinal

C.M.
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La petición está sobre la mesa de Vías Públicas aunque todavía no hay fecha. Se mejorará el pavimento y el mobiliario urbano. El espacio privado de uso público tendrá que esperar

Las jardineras presentan un aspecto muy deteriorado. - Foto: Valdivielso

Desde hace años los vecinos de los Vadillos se quejan del mal estado en el que se encuentra la plaza con baldosas levantadas, jardineras destrozadas, falta de iluminación o mobiliario urbano obsoleto pero las respuesta que siempre se han encontrado en el Ayuntamiento era que se trataba de un espacio privado de uso público. Es decir, un lugar por el que puede pasar todo el mundo pero de cuyo mantenimiento deben encargarse los propietarios. 

La puesta en marcha de los distritos y el surgimiento de una asociación vecinal en la zona ha conseguido mover un poco la situación y se ha arrancado el compromiso municipal de arreglar al menos el espacio público, el más cercano a la calle Delicias. «Todavía no hay fecha pero existe el compromiso de cambiar las baldosas e instalar nuevo mobiliario urbano. Ya lo saben en el área de Vías Públicas y estamos a la espera de saber cuándo podrían empezar las obras», indicó Fernando Martínez-Acitores, presidente del Distrito Centro Norte, en el que se integra este barrio.

Por lo que se refiere al espacio privado de uso público, únicamente está previsto realizar alguna plantación en las jardineras pero su arreglo tendrá que esperar. También sería necesario adecentar las escaleras e eliminar las barreras arquitectónicas, así como mejorar las baldosas de esas zonas pero todo ello tendrá que esperar.

Las jardineras de ladrillo están destrozadas y en su interior han crecido malas hierbas, lo que da un aspecto descuidado a la zona. Los residentes piden que se arreglen una rejilla que ayuda a recoger el agua de lluvia cerca de forjados de los garajes. Tiene un gran desnivel y se han producido varias caídas, dado que justo se encuentra a la entrada de una peluquería.

Desde la nueva asociación vecinal celebran que al menos se arregle una parte de la plaza pero seguirán peleando para que se actúe en todo el entorno y se cambie tanto la imagen como la funcionalidad. De hecho, sus miembros presentaron al Ayuntamiento un proyecto de ‘renaturalización’ del barrio, que tiene su origen en el movimiento vecinal nacido durante la crisis de la covid y cuyo símbolo era un corazón verde. 

La iniciativa, según explica Manuel Revilla, consiste en incentivar los negocios locales e iniciativas para mejorar la calidad de vida de los vecinos y los espacios públicos y la movilidad. «La idea es potenciar los espacios del barrio que están descuidados y carecen de funcionalidad y darles una nueva perspectiva. Hemos planteado colocar un pequeño escenario en la plaza para que los niños puedan jugar o los mayores se puedan sentar a descansar. Sería similar al tablero de ajedrez de la Universidad». 

También han propuesto un plan de movilidad más sostenible para el barrio en el que se «proteja» a los peatones y ciclistas, se reduzca el uso del vehículo privado y se fomente el transporte público, así como la eliminación de barreras arquitectónicas que todavía persisten en algunas zonas como es el caso de la plaza.

Finalmente, han sugerido para su estudio la posibilidad de ofrecer alternativas al aparcamiento que podrían pasar por la ampliación de la zona azul y la posibilidad de peatonalizar algunas calles.