Cinco personas han dado positivo este miércoles en los 2.194 test realizados en la Universidad de Burgos. Se trata de un 0,22% del total de participantes en el cribado dirigido a los miembros de la comunidad universitaria, una cifra significativamente menor que los resultados obtenidos en las pruebas masivas realizadas a finales de noviembre en Burgos capital (0,57%) y más recientemente en Lerma (1,08%), Miranda (0,71%) o Briviesca (0,96%). 

Igualmente es un porcentaje inferior al obtenido en los cribados realizados en la Universidad de León (0,8%) y Valladolid (0,65%). Este dato, valoran fuentes de la institución académica, ratifica al campus burgalés como un "espacio seguro".

La toma de muestras, organizada por la Universidad de Burgos y la Gerencia de Atención Primaria del SACyL siguiendo un modelo ya puesto en práctica en otras universidades públicas de la región, se ha llevado a cabo a ritmo constante, desarrollándose en los ocho puntos habilitados para ello en el Polideportivo Universitario y sin que se hayan producido esperas superiores a los 30 minutos en los momentos de mayor afluencia.

Antes de las nueve de la mañana, las primeras personas que acudieron al complejo deportivo aguardaban ya su turno para realizarse el test de antígenos de segunda generación, produciéndose algunas colas. Después, el ritmo de afluencia ha ido bajando y se ha mantenido sostenido, con algunos picos que coincidían, por ejemplo, con el fin de un examen. Miembros de Protección Civil controlaban la asistencia distribuyendo a los participantes en un circuito vallado para mantener las distancias de seguridad.

Más de 9.000 miembros de la comunidad universitaria, entre alumnos, profesores y personal de administración y servicios, estaban llamados a la prueba, que se ha extendido de forma ininterrumpida hasta las seis de la tarde. La participación ha rozado el 25%, una cifra que entraba en los cálculos de la Gerencia de Atención Primaria.