La Universidad Isabel I celebrará el próximo curso el décimo aniversario de su creación. Será entonces cuando elabore un nuevo plan estratégico para definir su futura oferta académica, aunque antes ampliará el catálogo de posgrados con la implantación de un máster en seguridad, defensa y liderazgo. Estos estudios se sumarán a los de Big Data y Ciberseguridad, reforzando así las propuestas académicas de formación a los estudiantes de la Facultad de Criminología.

«En el caso de la defensa, está orientado a cuestiones de geoestrategia y militares, y lo que tiene que ver con la seguridad afectaría más a empresas del sector privado y cuerpos de policía», explica el rector de la institución académica, Alberto Gómez Barahona, al tiempo que destaca que estas enseñanzas suponen avanzar en la especialización de los grados de Criminología y Ciencias de la Seguridad.

Gómez Barahona avanza que el próximo curso no se ampliará el número de carreras y recuerda que en el actual se estrenó el posgrado de Enseñanza de Español para Extranjeros, del que destaca el interés que ha despertado. Es en este punto y en lo que respecta a los primeros estudios, en el que hace hincapié de cara a los diez años que cumplirá la Universidad en el periodo  2022-2023 con un catálogo de 31 titulaciones. Esta fecha, según explica, se aprovechará para confeccionar un nuevo plan estratégico.

«Nuestro planteamiento inicial era de diez años y ha ido muy bien, pero ahora nos propondremos la nueva oferta tanto de grados como de másteres», señala el máximo responsable académico, avanzando que las facultades de Ciencias de la Salud y la de Ciencia y Tecnología «van a tener cierto un peso especial al ser estratégicas, lo que no significa que se no se amplíen los títulos del resto». No obstante, agrega que cualquier proyecto tiene que ser aprobado por los órganos de gobierno de la institución de enseñanza online y prefiere no detallar ninguna carrera hasta que no se defina dicho plan.

El perfil de estudiantes de la Isabel I nada tiene que ver con el de un campus público en el que la inmensa mayoría de las matrículas procede de alumnos que han terminado segundo de Bachillerato. En este caso, se trata de personas adultas incorporadas al mercado laboral que desean cursar estudios superiores, ampliar los que tienen o mejorar en su carrera profesional. Gómez Barahona sostiene que no existen grados más o menos demandados, ya que todos cuentan con un elevado interés, bien sean los de Ciencias Jurídicas y Económicas, Salud, Ingeniería Informática, Humanidades o Educación.