La remodelación integral de los Jardines de Don Diego, en Aranda de Duero, ha despertado un notable interés entre constructoras fundamentalmente de la zona. En total, seis empresas han presentado sus ofertas para hacerse con un contrato que el Ayuntamiento de la capital ribereña sacó a licitación en octubre por 2,9 millones de euros.
La propuesta de la unión temporal de empresas (UTE) formada por Arpape-Beltrán, valorada en 1.991.128 euros, resultó la más ventajosa de todas las registradas en la sede del Consistorio arandino. Le siguió la oferta de la UTE Herrero-Uribe, que asciende a 2.053.259 euros. En tercer lugar finalizó Blasgon. En su caso, fijaron una inversión de 2.062.994 euros. Mientras, la salmantina Mahoci presentó una oferta por 2.186.781 euros.
Entre las constructoras que optan al arreglo del entorno de los Jardines de Don Diego, en pleno centro de la capital ribereña, también figura la UTE CHR-Joca, cuya propuesta se elevó a 2.238.832 euros. Finalmente, la UTE Ciser-Inderfor planteó la ejecución de estas obras por 2.360.993 euros.
En la mayoría de los casos, se comprometieron a ampliar el plazo de garantía de las obras y a contratar a personas desempleadas por ser criterios que puntúan al alza en el proceso de licitación.
Ahora bien, la oferta económica, que se valora con 65 puntos, ha de ponderarse con otros 35 puntos de la técnica. De ese cálculo saldrá la empresa a la que se propondrá la adjudicación de una obra de gran importancia para la ciudad por tratarse de un entorno estratégico que arrastra años de desperfectos.
Mejoras. El proyecto de renovación integral abarca el triángulo que forman el cruce con las calles Postas y Miranda do Douro, hasta el enlace con Sol de las Moreras en su lado sur y hasta los pasos de cebra a la altura de Carrequemada, incluyendo en su ámbito de actuación la plaza de la Virgencilla.
Para la mejora de la fluidez del tráfico rodado y peatonal, la acera sur entre el restaurante El Ciprés y la actual sede de la Policía Local se ensanchará considerablemente y se ganará espacio en la calzada para crear un carril bici eliminando los 22 aparcamientos que todavía quedan en esta zona. Además, la regulación del tránsito de vehículos en este enclave se hará a través de dos rotondas, una junto a la calle Postas y otra a la altura de San Gregorio.
Los pasos para peatones también sufrirán algunos cambios. El que parte del restaurante El Ciprés se desplazará hacia la comisaría mientras que el que hay frente a los quioscos, que desaparecen, se traslada a la desembocadura de la plaza de la Constitución. Se crearán 4 zonas verdes y se recuperará la fuente junto al monumento a don Diego Arias de Miranda.