Ayer fue un día negro para Burgos, cuyos hospitales certificaron en 24 horas cinco muertes por covid o, al menos, con la infección diagnosticada. Es el mayor número de defunciones registrado en 24 horas desde hace más de un año. En total, desde el comienzo de la pandemia han fallecido por la enfermedad del coronavirus (o con la covid confirmada) 867 pacientes del HUBU, del Santos Reyes y del Santiago Apóstol. En las residencias de ancianos murieron otras 310 personas, sobre todo durante la primera y segunda oleadas. Ahora, los usuarios de geriátricos con una forma grave de covid son trasladados a los hospitales y, en general, si la situación es irreversible la defunción se produce en un centro sanitario.
La situación epidemiológica, sin embargo, sigue mejorando. Ayer se notificaron 1.148 contagios, que son menos de los declarados en lunes de las tres semanas previas. Eso permite que las incidencias sigan cayendo.