Había más purpurina que canas en las primeras filas del concierto de Jeanette, la fiera musical más fuera de sitio de esta primera jornada vespertina de Sonorama Ribera. Con los prejuicios pasa como con la frase de una de sus míticas canciones, Porque te vas (y no preguntes por qué), que casi todo el mundo pone el acento donde no debe.
Resulta que al final, ayer todos querían ser como el niño aquel que sueña, que ríe, que olvida el rencor y que siente solo amor. Rebelde, como Alberto, el cantante de Miss Caffeina, una de las bandas que no está en el cartel, por lo que se intuye que al menos él puede estar sobre el escenario del concierto de 25 aniversario. En una noche que no acaba, como Gabriel, la voz de Shinova, o lanzando una moneda al aire, como Coque Malla, que comparte con la cantante hispano-británica un tema en su disco Mujeres.
Porque a final todos querían ser como Jeanette, y conservar a los 70 años las ganas de subirse a un escenario y atreverse a cantar sola con el que fuera líder de Los Ronaldos y su guitarra, o a bailar San Francisco, o a tener el detalle de convertir en protagonista a la voz que le hace los coros, preciosa voz, por cierto la de Cloe.
El primer invitado de Jeanette fue Alberto, cantante de Miss Cafeína. - Foto: ValdivielsoJeanette no esconde su edad, es más, la proyecta sobre una pantalla con imágenes naif que retrotrae a los 70, con esas letras tristes pero aterciopeladas, compuestas por Manuel Alejandro o José Luis Perales, que ayer pusieron el toque retro a este Sonorama en el que las emociones están a flor de piel.
Para Jeanette y Gabriel de la Rosa no quedaba nada de que hablar pero para otros sí. Y que reivindicar. Cifu, el líder de Celtas Cortos, se enfundó una camiseta de apoyo a Ucrania y ya en su segunda canción cargaba contra quien inventó las fronteras y tiene en danza a 90 millones de desplazados por el mundo. Después, la fuerza estuvo en una banda que lo mismo le da al violín que a la flauta travesera, que no pierde ni su esencia celta ni la capacidad para saltar al ska a golpe de trombón ni la intensidad para bailar más que su público. Un concierto que se hizo corto, aunque al menos dio la oportunidad de corear a voz en grito que 'no nos podrán parar' y a asentir con la cabeza cuando Cifu decía aquello de 'lo mismo hasta tienes críos'.
'Yo la verdad como siempre', como en los 80, sigo coreando a Los Secretos. Debutaron por primera vez en elEscenario Ribera de Duero del Sonorama a una hora más taurina que de concierto, cuando muchos aún hacían cola para cargar la pulsera y más calor hacía en El Picón, pero no por eso dejaron de agradecer a sus incondicionales que les hayan ayudado a ser número 1 en tantas ocasiones, con temas como Por la calle del olvido, Ojos de Gata, Te he echado de menos o Pero a tú lado.