El deteriorado estado de conservación de una parte significativa del convento de Santa Clara en Briviesca, propiedad de Iesu Communio, se ha incrementado con los años, hasta el punto de que la Asociación Hispania Nostra incluyó hace tres años el claustro gótico en la Lista Roja del Patrimonio en peligro. Sin embargo, desde la Junta aseguran que «de todas las líneas de subvenciones convocadas encaminadas a la protección y difusión del patrimonio cultural, la comunidad religiosa no ha solicitado ninguna» destinada para acondicionar el deteriorado inmueble.

La amenaza de derrumbe acecha al claustro gótico y el alcalde del municipio, Álvaro Morales, alerta del «inminente peligro» existente si la Junta, «que es la que tiene la misión de proteger el patrimonio», no actúa con urgencia para evitar el desastre.

La normativa de Patrimonio Cultural establece que deben de ser los propietarios y gestores de los bienes integrantes los obligados a conservarlos, custodiarlos y protegerlos debidamente para asegurar su integridad y evitar su pérdida, destrucción o deterioro. Esto no obsta para que la administración regional establezca las estrategias, criterios de intervención, los programas y subvenciones. «Cualquier intervención se determina atendiendo a las necesidades técnicas del bien, a las prioridades existentes en todo el ámbito de la comunidad, en función de las disponibilidades presupuestarias, priorizando los Bienes declarados de Interés Cultural y asegurando la corresponsabilidad de todos los agentes implicados. No hay constancia de ninguna petición al respecto por parte del instituto religioso», aclaran fuentes de la Junta.

Tras la aprobación de la Resolución por la Comisión de Cultura y Turismo de las Cortes se dirigieron escritos a Iesu Communio y al Ayuntamiento de Briviesca «para que valoraran posibles soluciones para el convento de Santa Clara pero no hemos obtenido respuesta hasta la fecha», sentencian.