El servicio nocturno de la Policía Local de Briviesca se retomó el pasado domingo y se alargará durante los próximos seis días y la última semana de agosto tal y como quedó establecido en el calendario laboral de 2020. Pese a que se fijó tal fecha porque coincidía con la semana de celebración de las fiestas patronales de Nuestra Señora y San Roque, las guardias de madrugada ayudarán a evitar a que la gente se reúna en espacios públicos incumpliendo las normas marcadas por la Comunidad Autónoma. «Hasta ahora ha sido imposible controlar las reuniones de los más jóvenes en espacios públicos de noche», explica el jefe de la Policía.
«Las constantes quejas que hemos recibido por parte de los vecinos prácticamente desde que finalizó el estado de alarma sobre las veladas nocturnas en parques y paseos de la ciudad las hemos trasladado al Ayuntamiento, que ha tomado cartas en el asunto», declaran fuentes del cuerpo de seguridad. Así, el alcalde del municipio, Álvaro Morales, ha aprobado un decreto en el que se dictamina el cierre de parques y paseos con el fin de frenar el botellón y otros comportamientos nocivos para la salud pública en Briviesca y evitar que los casos de coronavirus se expandan con rapidez por la capital burebana.
El parque de La Florida, el de La Isla, el de la Magdalena, el paseo del río Oca y el depósito de agua -que corresponden a los lugares más frecuentados por gente joven tanto de día como de noche- permanecerán cerrados y precintados en horario de 00:00 a 07:00 horas. Las quedadas al aire libre para beber y en las que no se pueda mantener la distancia interpersonal de seguridad, tanto en zonas públicas como en lonjas o locales de edificios, quedan prohibidas también en el caso de que sean molestas o peligrosas para los colindantes.
Asimismo, el regido apela a la responsabilidad de cada uno para así poder controlar la transmisión del virus en la zona básica de salud de Briviesca, que actualmente se halla en alerta naranja por el número de nuevos casos de la enfermedad. «Lo ideal sería que todas las noches de agosto estuviesen cubiertas por agentes pero el calendario es inalterable y está fijado así. Ante la falta de efectivos tiene que haber voluntariedad por la plantilla que está trabajando», aclaran desde las dependencias briviescanas. Por el momento, los agentes no han puesto multas por los escándalos nocturnos pero aseguran que la vigilancia «será continua por el bien de toda la población».
Vasos a medias en el parque Villacobos. El Ayuntamiento de Medina de Pomar denuncia de nuevo los escenarios de botellón que los operarios municipales y los vecinos se encuentran los últimos fines de semana en la ciudad. En esta ocasión, el parque Villacobos fue el lugar elegido por varias personas para reunirse y tomar unas copas. Los restos de basura volvieron a quedarse sin recoger. El Consistorio llama a la responsabilidad de los jóvenes y recuerdan que el consumo de alcohol en la vía pública está prohibido y puede conllevar sanciones económicas importantes.
Igualmente, el equipo de gobierno local afirma que el alcohol en grandes cantidades no solo es «perjudicial para la salud sino que puede fomentar la transmisión del COVID-19 al igual que los residuos que quedan abandonados en los parques, que también suponen un agente de contaminación medio ambiental».
Desde que se levantó el estado de alarma es habitual que la los jóvenes se reúnan en zonas públicas del municipio en grandes grupos incumpliendo la ley.