Menos tráfico en las vías 'clásicas' o en las más céntricas y un desplazamiento de los recorridos hacia las circunvalaciones internas, que se nota especialmente allá donde la ciudad se va expandiendo. Los hábitos de los conductores burgaleses van adaptándose al crecimiento de la trama urbana y la población progresiva de barrios como el S-4 o Cellophane se traslada a los números que analizan la movilidad en vehículo privado.

La avenida de las Islas Baleares y el bulevar del ferrocarril presentan un ligero pero constante incremento del tráfico a lo largo de los últimos años. De hecho, ya tienen más movimiento que antes de la pandemia, y eso llama especialmente la atención en un contexto general de estancamiento o incluso disminución.

El área de Tráfico del Ayuntamiento de Burgos ha elaborado un análisis comparativo en 34 puntos de medición a lo largo y ancho del término municipal. Tomando una semana de mediados octubre y otra de noviembre de 2019, y enfrentando estos datos a los del mismo periodo de 2021, se observa que la gran mayoría de sensores ha registrado menos movimiento que hace dos años. Sin embargo, unos pocos llama la atención por el comportamiento contrario.

Se trata de los situados en el bulevar, en dirección este, a la altura de la calle Bonifacio Zamora de Usabel (junto a San Agustín), donde ya se superan los 4.500 vehículos de intensidad media diaria. También en el mismo punto pero en dirección oeste hay un crecimiento que llevó a los medidores por encima de los 7.000 en el mes de octubre. Parece lógica esta subida, pues en los alrededores no paran de construirse viviendas a lo largo de los últimos años.

Casi en el otro extremo de la ciudad, en la calle Islas Baleares cerca de su intersección con la avenida de Cantabria, pasan diariamente casi 15.000 vehículos en sentido este y más de 11.000 en dirección oeste. Y se registran también pequeños incrementos en la calle Vitoria a la altura de la Barriada Militar (en sentido Gamonal), así como en la calle Madrid a la altura del pasaje de la Caja de Ahorros Municipal.

Desde el departamento que dirige el concejal Adolfo Díez explican que la mayor circulación detectada en Islas Baleares no solo puede deberse a la conexión con las zonas residenciales situadas frente a la estación de trenes, donde prácticamente cada mes se termina un edificio nuevo, sino también «vinculada a la actividad del hospital, pero no se trata de datos importantes que nos lleven a intentar analizarlos o buscar soluciones».

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