Ningún hogar español ha sufrido el corte del suministro de agua por no poder pagarlo durante los dos últimos años de pandemia. Así se recoge en un estudio, realizado por el Observatorio de Servicios Urbanos (OSUR), en colaboración con Cáritas, y del que también se desprende que en este periodo los operadores aumentaron las bonificaciones en esta materia para las familias más vulnerables.

El exministro de Justicia y presidente de OSUR, Francisco Caamaño, ha sido el responsable de este presentar estos datos y de anunciar la incorporación de la garantía y universalidad de la prestación d elos servicios públicos en situaciones de vulnerabilidad de los usuarios en todos sus informes, así como la calidad laboral y la equidad de género en las empresas.

El documento recoge los datos de 34 ciudades entre las que, según ha indicado Caamaño, se encuentran algunas de las más pobladas, por el que se determina que las bonificaciones sociales para el acceso al agua han aumentado entre el 20% y el 300% dependiendo del histórico de bonificaciones previas y, según ha destacado OSUR, han aumentado "mucho más" en los municipios que menos bonificaban en el pasado.

Basándose en los indicadores del trabajo, el informe da una puntuación de entre 0 y 3 que se ha otorgado a los diferentes operadores de suministro de agua estudiados. En este sentido, el presidente de OSUR ha explicado que 10 se sitúan por debajo del 2 y que, según ha indicado, si tuvieran que decidir entre a quién ayudar y a quién cortar el suministro "tendrían problemas".

Reconocimiento a aguas de Barcelona 

Por otra parte, otros 23 operadores están entre el 2 y el 3. Se trata, según ha indicado Caamaño, de operadores que "aunque existen matices" tienen "herramientas y voluntad" para identificar y proteger a los usuarios con problemas de acceso a este bien.

Y, por último, el exminitro ha destacado a un operador que ha sido el único que, según ha señalado, se pasa "por mucho" de la puntuación máxima porque "cuadruplica" las ayudas a las personas vulnerables sobre el resto de operadoras. Caamaño ha explicado que esta empresa es Aguas de Barcelona (AGBAR).

Su presidente, Ángel Simón, ha agradecido este reconocimiento en el acto, en el que ha señalado que en Aguas de Barcelona se coloca al ciudadano en el centro de su actividad, al menos, desde la pasada crisis de 2008, cuando comenzó a trabajar con UGT, Cáritas y Cruz Roja, para tratar este tema.

En su intervención ha puesto en valor el papel de las empresas durante la pandemia a la hora de "hacer funcionar" al país, así como en su "reconstrucción" posterior a la crisis sanitaria.

Del mismo modo, ha señalado el Cambio Climático y la desigualdad social como los "próximos" temas sociales a los que se tienen que enfrentar compañías como la suya y ha llamado a estas a crear un modelo de "sostenibilidad con visión social", poniendo en marcha líneas de diálogo y cooperación entre las propias empresas y para la colaboración público privada. A juicio de Simón, "nadie de forma individual" podrá poner solución a este problema.

En el acto también han participado la secretaria general de Cáritas, Natalia Peiró, y el coordinador nacional de Cruz Roja, Antoni Bruel. Ambos han llamado a poner las políticas de servicio público al servicio de las personas y más elementos de coordinación entre las mismas para evitar situaciones en las que personas vulnerables se quedan sin unas ayudas por acceder a otras.