Roberto Peral

Habas Contadas

Roberto Peral


Descambios

10/01/2022

Pasada la solemnidad de la Epifanía del Señor, fecha en la que un año más (y van…) los magos de Oriente no supieron hacer justicia al ejemplar comportamiento que este articulista había observado a lo largo de todo el año, mi progenie se entregó con fervor el pasado viernes a una tradición hasta entonces desconocida para un servidor pero que, según fui convenientemente informado, hace furor entre la muchachada de todo el país: el descambio.

Con mucho y con ser sabios, Melchor, Gaspar y Baltasar distan bastante, según todos los indicios, de resultar infalibles, así que los adolescentes burgaleses dedicaron unas cuantas horas del 7 de enero a atestar las franquicias de ropa confeccionada en serie a fin de trocar ese airoso gabán que a su parecer les tiraba un poco de la sisa, o esas deportivas de mil y un colores que según ellos les martirizaban el dedo gordo del pie, por escuetos vestidos de satén, botas de inspiración punk y otros complementos de moda que ni sus majestades ni sus representantes en la Tierra, los sufridos papás de las criaturas, habíamos sido capaces de apreciar en su justa medida.

Como quiera que la resaca del día de Reyes coincide en muchos casos con el inicio de la campaña de rebajas, la jornada de marras abre habitualmente una nada discreta puerta a la picaresca, y algunos desahogados, con la participación de entusiastas cómplices, aprovechan para llevarse envuelto el mismo pantalón que decían querer devolver y, por el mismo precio, incluir en la bolsa un pijama corto y un par de camisas estampadas.

Pero tan singular fiesta atesora también algunas curiosas virtudes: por una vez no llega a desvanecerse la tinta de los malhadados tiques de papel térmico que nos entregan como registro de compra, y además damos vida a una palabra bendecida por la RAE que podemos exportar a otros muchos ámbitos.

Al calor de estos primeros y materialistas días de enero, algunos anhelan descambiar entrenadores, otros exigen descambiar uno que otro ministro e incluso los hay que descambiarían gobiernos enteros. Sepan estos últimos impacientes que, para asuntos de tal naturaleza, las rebajas comienzan en Castilla y León el domingo 13 de febrero.