La Junta de Gobierno Local ha aprobado esta mañana la creación de dos puestos de controlador de billetaje en los autobuses urbanos. Estos empleados rotarán por las distintas líneas para comprobar que todos los pasajeros que han entrado en los autocares hayan pagado. La idea de esta iniciativa, según ha detallado el vicelcalde, Vicente Marañón, es reducir el fraude pero también garantizar que todos los viajeros cuentan con el seguro que les otorga el pago por el trayecto.

Los dos trabajadores ya se encuentran en la plantilla del Servicio Municipalizado de Movilidad y Transportes (Smyt) y la idea es que comiencen la labor inspectora de manera inminente.

Por otro lado, Marañón se he referido también a la reunión que ayer mantuvieron con los vecinos de Gamonal (ver edición impresa de hoy de Diario de Burgos) y ha admitido que la fórmula escogida por las asociaciones, relativa a la que se mantengan los cuatro carriles de la circulación y se elimine el aparcamiento para ensanchar las aceras, no era la que más le gustaba al bipartito pero "democráticamente" aceptan esa voluntad y las obras se ejecutarán tal y como se les demandó ayer.

En la Junta de Gobierno se ha aprobado esta mañana la adjudicación a la empresa de inserción GRM (Fundación Lesmes) la gestión de los puntos limpios de la ciudad. El Ayuntamiento pagará por este servicio algo más de 1,2 millones de euros durante los próximos 5 años y la principal novedad será la incorporación del punto limpio móvil, que se desplazará por todos los barrios de la ciudad para recoger electrodomésticos y otros residuos de pequeño tamaño.