La gran obra del románico burgalés pasea por Ribera y Arlanza

P.C.P.
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Cerca de un centenar de monumentos de los partidos judiciales de Aranda y Lerma se integran en el segundo volumen del magno trabajo de Félix Palomero y Magdalena Ylardia, que edita la Diputación

Félix Palomero (i.), César Rico y Raquel Contreras, en la presentación del segundo volumen. - Foto: Patricia

Cerca de un centenar de monumentos de los partidos de Aranda de Duero y Lerma ilumina las páginas del segundo volumen de El arte románico burgalés, la magna obra escrita por Félix Palomero y Magdalena Ylardia y editada por la Diputación Provincial.

Su presidente ha presentado hoy, acompañado de la diputada Raquel Contreras este segundo tomo, del que se han impreso 500 ejemplares, que se venden a un precio de 45 euros. César Rico considera necesario destacar unas "piezas extraordinarias, inigualables" que ayudan a "poner en valor la historia de España, de Castilla y León y de Burgos a través del arte románico", destaca. Además, avanza que se van a editar unos folletos para que burgaleses y visitantes puedan acceder a una pequeña parte de este ingente conocimiento en un formato más manejable.

Félix Palomero desgrana los contenidos de este volumen de El arte románico burgalés, con una primera parte en la que se presentan colegiatas, como las de Covarrubias y San Millán de Lara, e iglesias como Moradillo de Sedano, que además protagoniza la foto de portada. La segunda parte arranca cpon las escuelas y talleres que el matrimonio ha encontrado en estos monumentos, para a continuación realizar una monografía de los hitos románicos más significativos de la Ribera y el Arlanza. De la primera zona cree que sorprenderá la ermita de Hinojar del Rey, que tiene un sistema constructivo del mundo tardorománico que luego se convierte al románico", añadiendo entre otros elementos una galería porticada. De la segunda comarca elige la iglesia de Tordómar. "La estructura no es muy notable pero la fábrica es monumental", reseña.

Cada una de ellas repite el esquema expositivo con una presentación, en la que se indica cómo llegar, unos datos históricos de contexto, sobre todo medievales, una descripción de la arquitectura y la escultura que se va a encontrar el lector o el visitante, un análisis técnico y una pequeña bibliografía. Todo ello va a compañado de fotografías y en algunos casos, de un croquis.

Palomero, que defiende que "el románico ha sido más importante que el gótico" en Burgos, aunque sus habitantes "no han sabido valorar este arte", avanza que en el siguiente volumen abordarán el arte de este periodo en los partidos de Salas de los Infantes y Briviesca para dedicar el cuarto y más voluminoso al de Burgos. Miranda, incluido Treviño, y Villarcayo se condensarán en el quinto y el sexto se ha planteado a modo de conclusiones con un estudio amplio sobre el Monasterio de Santo Domingo de Silos, sobre todo de su escultura y sus pilas bautismales.