Los ciclos de Formación Profesional en el instituto Merindades de Castilla, de Villarcayo, nunca antes habían atraído tanto alumnado. Con 117, de un total de 390 alumnos, el nuevo curso bate récord en FP frente a los 79 del pasado. Hasta ahora ni tan siquiera se había superado el centenar de matrículas en ciclos de FP, según el director José Manuel López Bañuelos, que se muestra muy satisfecho con el resultado de la intensa campaña que realizó el centro en las redes sociales para promocionar todas sus enseñanzas, entre ellas, el recién estrenado ciclo de grado medio en Cocina y Restauración, con 17 matriculados.
Los alumnos de este ciclo, además, acaban de estrenar las flamantes aulas del ala izquierda del antiguo colegio Princesa de España, en el que el Ayuntamiento ha invertido 588.000 euros, de los que 119.788 han sido aportados por la Junta de Castilla y León a través del Fondo de Cooperación Local que le corresponde al municipio. Asimismo, el Consistorio ha tirado de las ayudas de los planes provinciales de la Diputación que le corresponden para apoyar esta importante inversión sufragada con presupuestos de 2021 y 2022. Pese a todo, el alcalde Adrián Serna, como el director del centro, admite que los números en el nuevo grado medio de Cocina «nos tienen muy satisfechos y avalan la decisión de pasar de los certificados de profesionalidad en Cocina que expedía Empleo a la Formación Profesional reglada de Educación». «Fue una decisión importante que avalamos con una elevada inversión, porque creemos en este tipo de proyectos, cuyos resultados se ven a medio y largo plazo», continúa el regidor.
Sitio para el superior. Para Serna, «la educación es un pilar fundamental para el desarrollo del municipio» y por ello confía en que el grado medio de Cocina siga atrayendo suficiente alumnado en 2023 de cara a solicitar a la Junta de Castilla y León la implantación del ciclo de grado superior. De hecho, la zona del antiguo colegio rehabilitada cuenta con siete aulas, con lo que incluso sobraría una para albergar tanto a los alumnos de la FP Básica de Cocina, estrenada en 2020, el grado medio y si llegara, a los del superior.
Si Cocina perdiera atractivo y no lograra atraer alumnos, el alcalde considera que las instalaciones habilitadas quedarían ahí para otras apuestas por la formación y siempre darán un servicio.
No obstante, junto al recién estrenado ciclo de grado medio de Cocina, que ha elevado la matrícula de FP, al no existir el pasado curso, el instituto villarcayés también ha visto crecer el número de alumnos en el primer curso de la FP Básica de Cocina, que ha subido de 6 a 9, y en primero de la FPBásica de Servicios Comerciales, que ha crecido de 8 a 11 alumnos. Asimismo, ha ganado matrículas el primer curso del grado medio de Gestión Administrativa, que ha pasado de 13 a 20, aunque Instalaciones Eléctricas y Automáticas y el ciclo de grado superior de Administración y Finanzas han disminuido sus matriculados.
El alcalde villarcayés no descarta seguir reclamando a Educación nuevos ciclos más allá de la familia de Cocina. «Siempre que haya demanda trabajaremos por más ciclos de FP», insiste Serna, quien considera que los espacios no serían problema y se podrían seguir habilitando en el mismo edificio del antiguo Princesa de España.