La invasión de Rusia a Ucrania no ha hecho más que evidenciar la constante necesidad de reforzar la defensa de la Unión Europea. Por ello, Buselas se ha visto obligada a actualizar sus planes en materia de seguridad, con una nueva estrategia para los próximos 10 años, conocida como Brújula Estratégica.
Una actualización, que responde, no obstante, a un panorama más amplio de retos y amenazas. Y es que no solo se trata del desafío en el este de Europa: la UE también está en alerta por China, el Ártico, África, Oriente Próximo, la región indo-pacífica o América Latina, así como por fenómenos como el terrorismo, la expansión de las armas nucleares, las campañas de desinformación, los ciberataques o el cambio climático. Todo ello para que, a lo largo de cuatro grandes apartados, el bloque comunitario se transforme en una entidad más autónoma para garantizar su protección y la de otras regiones en el mundo.
Actuar
Una de las iniciativas estrella de la Brújula es la creación de una capacidad de despliegue rápido de los Veintisiete que permita la puesta en marcha de una fuerza modular de hasta 5.000 efectivos en un entorno no permisivo y que esté plenamente activa para 2025. Este año se acordarán ya escenarios operativos y, a partir de 2023, iniciará sus ejercicios regulares.
Las misiones de la Política Común de Seguridad y Defensa (PCSD) serán más robustas, flexibles y modulares, para lo que a mediados de este 2022 se adaptará su modelo y, a finales, se establecerán vínculos operativos entre misiones. Además, el próximo año, se adoptará un nuevo Pacto Civil con idea de poder desplegar una misión civil de 200 expertos totalmente equipados en un plazo de 30 días.
Se aumentará, además, el número de mujeres en todas las funciones, incluidos los puestos de liderazgo, mientras que para 2023 se reforzarán los asesores en derechos humanos y género en las misiones.
Asimismo, se seguirán realizando actividades periódicas para reforzar la asistencia mutua en caso de agresión armada, lo que incluirá ejercicios cibernéticos regulares.
Asegurar
Para finales de año, la Capacidad Única de Análisis de Inteligencia revisará las amenazas de la UE en estrecha colaboración con los servicios de inteligencia de los países integrantes y, para 2025, se reforzará esa respuesta con más recursos y el Centro de Satélites de Bruselas con vistas a tener más autonomía en inteligencia geoespacial.
Está previsto, además, el desarrollo de una caja de herramientas híbridas, un marco para una respuesta coordinada a las campañas que afecten a los Veintisiete, con medidas preventivas, de cooperación, de estabilidad y restrictivas. También en 2022 se impulsará un marco para la manipulación e interferencia de la información en el extranjero, que pueda llegar incluso a poner costes a los autores de las amenazas, mientras que en 2023 se creará un mecanismo para recopilar sistemáticamente datos sobre incidentes. Dentro de dos años, todas las misiones de la PCSD estarán plenamente equipadas para hacer frente a amenazas híbridas.
Está prevista, asimismo, una estrategia espacial para la seguridad, y se revisarán los programas de la UE que contribuyen a desarrollar las capacidades de los socios contra el terrorismo.
Invertir
Bruselas abordará sus objetivos sobre el aumento y la mejora del gasto en Defensa para que se ajuste a sus necesidades de seguridad, se maximice la producción y aumente la interoperabilidad. Para mediados de mayo, los países piden que la Comisión impulse un análisis de las lagunas en inversión.
Durante esta década, la UE se propone desarrollar un sistema de carros de combate, sustituir los buques de patrulla costeros y de alta mar mediante el desarrollo de plataformas navales conectadas en red, impulsar los sistemas aéreos no tripulados, o avanzar en nuevos sensores para la observación de la Tierra desde el espacio.
Igualmente, se tomarán medidas para facilitar el acceso a la financiación privada para la industria de la defensa, y en 2023 se trabajará en una propuesta de la Comisión que permita una exención del IVA para apoyar la adquisición conjunta y la propiedad de las capacidades de protección desarrolladas de forma conjunta en la UE.
Asociaciones
Otro de los objetivos es seguir ampliando la asociación estratégica, el diálogo político y la cooperación con la OTAN en todos los ámbitos de interacción acordados, incluidos nuevos ejes de trabajo como la resiliencia, las tecnologías disruptivas emergentes, el clima y el espacio. También se pondrá en marcha el conjunto de prioridades para la cooperación con la ONU hasta 2024.
Este 2022, se celebrará en Bruselas el primer foro bienal de asociaciones de seguridad, un año en el que se quiere profundizar en la cooperación con la OSCE, la Unión Africana y la ASEAN.
Además, se intentará avanzar en un diálogo específico sobre seguridad y defensa con EEUU, se ahondará en la cooperación con Noruega y Canadá, en los diálogos sobre seguridad y protección con los Balcanes Occidentales, los países vecinos del este y del sur, el Indo-Pacífico y América Latina.
Y de aquí al próximo año, se intentarán realizar ejercicios marítimos en vivo con los socios del Indo-Pacífico, además de escalas portuarias y patrullas de la Unión Europea más frecuentes.