Miranda recula con la zona azul y seguirá cobrando por aparcar

ARSENIO BESGA
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El Ayuntamiento anunció que iba a eliminar la ORA, pero ha cambiado de opinión a menos de tres meses de que finalice la actual gestión. Pretenden mejorar el servicio, aunque el pliego todavía no está listo

Desde el equipo de gobierno reconocían que la zona azul de Miranda «es la más cara de la provincia». - Foto: Luis López Araico

Miranda continuará con la zona azul en sus calles, pese a que el equipo de Gobierno anunció en 2021 que pretendía eliminarla. Su intención ahora pasa por mejorar el servicio de ORA, hacerlo más asequible y eficiente, pero el tiempo apremia y no parece viable que el nuevo contrato se pueda adjudicar antes del 31 de agosto, fecha en la que finaliza la vinculación en vigor. Por tanto, desde el Ayuntamiento han realizado una modificación de crédito de 71.000 euros para cubrir la prórroga del actual acuerdo.

Esta inversión, en principio, no estaba considerada al diseñar los presupuestos municipales del presente ejercicio. De ahí que se deba derivar una cuantía de otra partida. En particular, el dinero necesario para prorrogar el contrato estaba destinado al centro sociocultural de mayores. Algo más de 60.000 iban a dedicarse a trabajos realizados por empresas y el resto tenían intención de emplearlo en otros gastos generales. 

Con todo, el Consistorio trabaja ya en redactar el nuevo pliego. Sin embargo, no basta con tener el documento preparado antes de que comience el mes de septiembre. Como paso previo a su entrada en vigor, deberían licitar el contrato y, finalmente, adjudicarlo. Es decir, resulta muy difícil cumplir esos trámites en un plazo tan ajustado. Los trabajadores que actualmente se encargan del servicio de la zona azul no han recibido ninguna notificación oficial. No obstante, les consta que sus representantes sindicales han conocido la evolución del proceso paso a paso. Eso sí, han escuchado las mismas noticias que la prensa y, en ningún caso, con demasiada antelación.

El viraje definitivo sobre esta cuestión por parte del equipo de Gobierno llega seis meses después de que la alcaldesa abriera la puerta a reconsiderar su decisión inicial. Por aquel entonces reconocía que iban a escuchar a todas las partes antes de sentenciar, o mantener, la ORA. El sector que mayor presión ejerció para que se extendiera en el tiempo la zona azul fue el de los comerciantes y la hostelería. En la segunda mitad de 2021 llegaron a recoger un total de 380 firmas para mostrar su descontento con la posible eliminación del servicio. «La gente de los pueblos y de las zonas más alejadas se anima a venir a consumir porque sabe que va a encontrar aparcamiento», advertía Pepe Rey, presidente de la Asociación de Hosteleros.

En cualquiera de los casos, sobre una cuestión existe casi absoluta unanimidad: la actual zona azul en Miranda tiene un coste demasiado elevado para los ciudadanos. Por ejemplo, el grupo municipal del Partido Popular expuso esta crítica hace varios meses. Sin embargo, para la formación política dicha realidad no era suficiente como para que la ORA desapareciese.Sencillamente, abogaban por abaratarla.

De forma similar, la alcaldesa reconocía en enero que el servicio «es el más caro de la provincia». Por aquel entonces, Hernando comentaba que para seguir en funcionamiento debía mejorar «en relación calidad precio». Según expresaba la edil del Partido Socialista, el Ayuntamiento de Miranda pretendía «buscar la forma de conjugar todos los intereses». Entre estos, conforme a sus palabras, le preocupaban especialmente «la movilidad en la ciudad y la situación de los trabajadores».

Así las cosas, el Consistorio ha considerado que la mejor forma de satisfacer todas las necesidades es mantener la ORAen vigor. Sin embargo, no renuncia a mejorar el servicio y hacerlo más accesible. Ahora bien, al menos durante los primeros meses del otoño no se percibirá demasiado cambio porque el contrato actual se extenderá más de lo previsto.