Récord de apertura de supermercados en plena crisis de precios

G. ARCE
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Al menos 23 establecimientos han abierto, anunciado su próxima implantación o su reapertura en la capital y la provincia en los últimos meses, mientras sigue el goteo de cierres de ultramarinos

El 95% de las ventas de alimentación seca (anvasada) se realiza en medianas y grandes superficies;el 40% de los alimentos frescos todavía se adquiere en pequeños comercios. - Foto: Luis López Araico

Los precios de los alimentos han subido «una burrada», como reconoció esta semana el presidente de Mercadona, hasta un 16% durante el último año, pero ello no ha impedido que los principales abastecedores de la cesta de la compra diaria, las medianas y grandes superficies, sigan prosperando, anunciando la apertura de nuevas implantaciones o la reapertura de centros bajo nuevas enseñas comerciales. La realidad es que, en medio de la crisis de consumo más grave de los últimos 30 años, hay más supermercados operativos (o en proyecto) que nunca en Burgos y su provincia, aunque su prosperidad trae consigo un continuo goteo de cierres de pequeños comercios de proximidad, más de setenta en los últimos 5 años, sobre todo en los entornos más vulnerables, los rurales.

Próximos a alcanzar los 150 establecimientos repartidos entre la capital y los principales municipios de la provincia, los hipermercados, supermercados y las diferentes fórmulas de gran formato (tiendas de conveniencia, discount, tiendas especializadas y cash) aglutinan más del 95% de las ventas de alimentación seca (envasada) y, poco a poco, restan ese 40% de ventas de alimentos frescos (carne, pescado, fruta y pan) que aún permanecía en manos del pequeño comercio de proximidad.

Los medianas y grandes superficies suman 117.000 m2 de sala de ventas y están presentes en 33 municipios de la provincia. Burgos capital cuenta con 49 (en datos de 2022), Aranda de Duero con 16 y Miranda de Ebro con 14, entre las plazas comerciales más importantes.

Son los dueños y señores de la cesta de la compra, los que marcan -de acuerdo a una compleja cadena de productores, transportistas, proveedores e intermediarios- una buena parte de los precios que conforman el IPC mensual, afectando directamente al poder adquisitivo familiar.

En este contexto de crisis de precios, los formatos comerciales más amplios prosperan; los más pequeños tienden a desaparecer, tras su inesperado florecimiento durante los meses de confinamiento de la pandemia.
Según los datos facilitados por la Cámara de Comercio de Burgos, a comienzos de 2022 se contabilizaban 89 establecimientos vinculados a alimentación de menos de 120 metros cuadrados (m2 ) en la provincia; 32 de entre 120 y 399 m2, los denominados superservicios; y 61 supermercados con más de 400 m2, la mayoría reunidos por el grupo firmas que monopolizan el mercado nacional (Mercadona, Alcampo, DIA, Lidl, Lupa, Alimerka, Carrefour, El Corte Inglés, Eroski o Suma, entre otras).

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