Barajan incentivos fiscales para reciclar basura orgánica

H.J.
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Los contenedores marrones, que se extenderán a toda la ciudad con el nuevo contrato, incluirán una apertura digital que identifique al ciudadano y que inicialmente será voluntario

El también llamado ‘quinto contenedor’ no ha cumplido sus expectativas y lleva años sin reposiciones, lo que obliga a repintar y reciclar elementos antiguos. - Foto: Patricia

El quinto contenedor, el que solo admite materia orgánica y es de color marrón, pasará de ser un proyecto piloto en dos barrios a extenderse por toda la ciudad con la entrada en vigor del nuevo contrato de recogida de basuras que acaba de adjudicar el Ayuntamiento. El experimento en el G-3 (Vista Alegre y en Cellophane arrancó en marzo de 2015 y ahora estará presente en cada una de las islas de reciclaje. Pero tendrán que cambiar muchas cosas para resultar efectivo, porque hasta ahora su resultado práctico ha sido poco menos que decepcionante.

Para incentivar su correcto uso habrá campañas de concienciación, pero podría haber un factor mucho más decisivo en la animación al reciclaje: incentivos fiscales.

El concejal de Medio Ambiente, Josué Temiño, explica que para utilizar el contenedor marrón de orgánica «el ciudadano necesitará una credencial que le permita abrir el contenedor, de esta forma se pretende conseguir una recogida sin restos impropios». No será obligatorio, ni mucho menos, sino que comenzará «por la población más concienciada que voluntariamente se inscriba para obtener esta identificación y usar el contenedor». Y a ellos es posible que se les premie con alguna rebaja en el recibo de las basuras, aunque Temiño advierte: «Es algo que habrá que abordar más adelante».

La futura ley estatal de residuos, cuya aprobación se prevé para el año 2022, «apunta en la dirección de cobrar en función de la generación real de residuos y el coste de su tratamiento» siguiendo las directivas europeas. En el caso de la ciudad de Burgos, la tasa de basuras está diferenciada del IBI y grava en función del valor catastral, así que apunta el edil socialista que «una posibilidad es bonificar a aquellos que separan por ejemplo el orgánico, y habría que también estudiar otras fracciones, pero habría que pensarlo muy bien cómo hacerlo y es una tarea que se deberá abordar una vez se apruebe la ley».

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