Los bonos hacen prever menos adhesión al 'Black Friday'

B.G.R
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Las asociaciones zonales coinciden en que este año no hay tanta «necesidad» como el pasado. La FEC, sin embargo, cree que la participación será masiva

Los bonos hacen prever menos adhesión al ‘Black Friday’ - Foto: Luis López Araico

Todas las asociaciones del sector coinciden en aplaudir la buena respuesta que están teniendo los bonos al consumo dirigidos al comercio. Desde que se pusieran en marcha el pasado 20 de septiembre, el volumen de ventas ha vuelto a niveles prepandemia con una mayor repercusión en la facturación que los del año pasado. Por este motivo, tanto la agrupación Centro Burgos como Zona G (Gamonal) prevén que este «empuje» disminuya la adhesión de las tiendas al llamado Black Friday o Viernes Negro, que se celebra el 26 de noviembre, seis días después de que finalice la campaña municipal de vales.

«Este año hay menos necesidad que el pasado», explica el presidente de Centro Burgos, Raúl Martínez, quien recuerda que la situación vivida en 2020 no puede compararse a la actual puesto que «estuvimos tres cerrados y se vendió menos mercancía en verano». En este sentido, apunta que desde junio hasta ahora la situación económica está muy cerca de la de 2019, gracias en buena medida al efecto de los cheques descuento, que considera una medida «muy efectiva» que beneficia tanto a los empresarios como a los consumidores. Por este motivo, reivindica su mantenimiento en 2022 y pone de relieve que «es una forma de que repercutan en los ciudadanos parte de sus impuestos».

Desde Zona G, su gerente, Borja García, también aboga por que la campaña se incluya para siempre en el calendario comercial de la ciudad, tal y como ocurre en otras ciudades como Bilbao. Al respecto, asegura que el sector no quiere que pase como hace años, que se puso en marcha solo una vez y ya no volvió a repetirse en el tiempo. «Los comerciantes están encantados por hay más movimiento de ventas y de clientes», manifiesta.

Este motivo es que le hace pensar que el Black Friday de este año  no contará con el mismo tirón que el del pasado porque la temporada «se está salvando y no resulta pésima como la de 2020». No obstante, la entidad lanzará una campaña para el Viernes Negro, con decoración a la entrada de los establecimientos y la edición de un plano virtual de las tiendas que participan. Aún no sabe cuántas se sumarán, mientras que Martínez calcula este porcentaje en torno al 60 o 70%, aunque precisa esto no significa que las ofertas sean agresivas.

Campañas diferentes. Las dos agrupaciones no realizarán ninguna recomendación a sus asociados y aseguran que cada empresario es libre de tomar la decisión que considere oportuna. De la misma forma procederá la Federación de Empresarios de Comercio (FEC), aunque la patronal se muestra convencida de la participación será masiva. «No podemos luchar contra una campaña mundial que secundan todos los grandes. O te subes al carro o ese día no vendes nada», señala su vicepresidente, Julián Vesga, quien valora que se trata de una «acción comercial» diferente a la de los bonos al consumo. 

En estos momentos el comercio está centrado en esta última, que supone un «empujón» para recuperar la normalidad y cuyo efecto se ha notado aún más a raíz del desfile de la FEC el pasado sábado junto a la Catedral, que ha dinamizado la venta de artículos mostrados.