Detectives tras los huesos del Cid

R.P.B.
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El Instituto Municipal de Cultura y el Archivo Municipal ofrecerán a partir del próximo curso un nuevo programa educativo: 'El des(en)tierro de los huesos del Cid', para alumnos de ESO, FP y Bachillerato

La tumba del Cid y de doña Jimena se halla en la nave central de la Catedral, bajo el cimborrio. - Foto: Valdivielso

‘El des(en)tierro de los huesos del Cid’. Así se llama el nuevo programa educativo que se sumará a la oferta que realiza el IMC, con el Archivo Municipal como impulsor y eje nuclear, a partir del próximo curso. Diseñado por el infatigable profesor Joaquín García Andrés (autor de otros exitosos programas, como ‘¿Quién mató al gobernador?’), este nuevo proyecto educativo plantea la realización de una investigación sobre las ideas y venidas de los huesos del Cid y de su esposa Jimena, centrados principalmente en los avatares vividos durante el siglo XIX hasta el momento de su inhumación ‘definitiva’ en la catedral burgalesa, precisamente ahora hace 100 años, y en el marco de la conmemoración del VIII centenario del primero templo metropolitano, "como una contribución específica desde el ámbito educativo. Este ha sido uno de los motivos de la elección de este tema, aparte del interés intrínseco de estos personajes y del destierro de sus restos óseos, motivo por el cual se ha elegido como título el juego de palabras que alude a sus múltiples entierros y desentierros", explica García Andrés.

La investigación tiene por objeto principal discriminar la autenticidad e integridad de los cuerpos enterrados en la Catedral de Burgos, "con la intención de evidenciar que ni están todos los que son, ni son todos los que están pero también para que el alumnado se familiarice con la aplicación del método científico; conforme a sus principios se concibe y orienta el trabajo. De modo que, a partir de la documentación real que se custodia en el Archivo Municipal de Burgos, principalmente las actas de exhumación, los escritos del mariscal Thiebault y diversos grabados, el trabajo se orienta al establecimiento de una hipótesis inicial que ha de ser comprobada mediante otras referencias, bibliográficas (el magnífico trabajo de Ana Fernández Beobide y Leyre Barriocanal Fernández) y, sobre todo, periodísticas (artículos de prensa en su mayor parte publicados en Diario de Burgos), con el fin de establecer una conclusión definitiva".

Como todo trabajo científico al uso, señala García Andrés, los resultados han de ser argumentados y compartidos con la sociedad, para lo que se contempla la realización de una sinopsis que recoja los principales hechos, autores, peripecias y consecuencias que evidencian la actual dispersión y fragmentación de los restos óseos dentro y fuera no ya de Burgos sino de España. Dado el carácter didáctico de esta esta propuesta, dirigida a estudiantes de ESO, FP y Bachillerato, el proceso se guía y, además, se desglosa en tres fases, consecutivas e integradas, pero con un nivel de dificultad creciente, y que en virtud de la situación sanitaria actual se ha concebido con la singularidad añadida de que pueda ser realizada íntegramente de forma virtual, a través de una web (https://joagarand.wixsite.com/huesosdelcid) en la que el estudiante y sus profesores encontrarán los recursos didácticos y las fuentes documentales necesarias para ello en formato digital, al margen de otros materiales de apoyo, entre ellos un pequeño vídeo que resume los acontecimientos previos ‘vividos’ por los difuntos antes del siglo XIX, momento en el que se ha centrado el grueso del trabajo de los estudiantes por el hecho de que la letra presenta menos dificultades para su lectura.

"El resultado de sus averiguaciones se plasma en un documento concebido como un ‘Informe forense’, lo que subsidiariamente otorga a los estudiantes el papel de policías, antropólogos, biólogos o arqueólogos. Y esta es otra de las singularidades de esta actividad: la de brindar la oportunidad, si así se desea, de contemplar la implicación efectiva y simultánea de varias asignaturas, principalmente Historia, Biología y Lengua Castellana, poniendo de manifiesto la importancia del trabajo en equipo, no ya solo dentro del ámbito de la actividad escolar, sino también, y sobre todo, con carácter interdisciplinar, como ocurre en la vida real", subraya el ideólogo de este programa educativo.

En este sentido, y para reforzar su dimensión y carácter científico, se ha contado con la colaboración y asesoramiento del Instituto de Medicina Legal de Burgos y la policía científica de la Brigada provincial del Cuerpo Nacional de Policía de esa ciudad, "que como complemento ofrecen a los centros educativos que participen en este proyecto la opción de realizar, cuando la situación sanitaria lo permita, tanto la visita a sus instalaciones, en el caso de los primeros, como la realización de charlas y demostraciones sobre sus actividades directamente en los centros educativos". Por supuesto, también lo hará el Archivo Municipal, impulsor de esta iniciativa y que, como en programas educativos precedentes, no sólo ‘abre sus puertas’ sino que contempla que una parte de esta investigación se lleve a cabo en su sede con los documentos reales.

Explica García Andrés que a modo de experiencia piloto previa a su difusión entre los centros educativos -a través de la oferta educativa del IMC- el profesor del I.E.S. Comuneros de Castilla David Tajadura ha realizado su testado con su alumnado de 2º de ESO, "con un resultado ampliamente satisfactorio que incluye la recomendación de estos estudiantes para que sea realizada por otros compañeros, pero que no obvia una dificultad consustancial a toda investigación cuando se trabajan con documentos manuscritos: la dificultad de lectura de algunas grafías, del mismo modo que para los docentes representa la legibilidad de la letra de más de uno (y de dos) de sus estudiantes en los trabajos y, sobre todo, en los exámenes, que aún se siguen haciendo a mano, como ‘antiguamente’", concluye.