«En el convenio con el Promesas hay que limar aspectos»

ROBERTO MENA
-

Miguel Ángel Benavente, directivo del Burgos CF, cree que puede ser positivo para ambos que el acuerdo cambie de términos y el vínculo entre ambas entidades sea más estrecho

Miguel Ángel Benavente junto a José Luis Fernández Manzanedo en las instalaciones de Castañares. - Foto: Christian Castrillo

El Burgos CF y el Burgos Promesas decidieron el pasado verano seguir de la mano. El margen de maniobra era escaso y ambos clubes estaban condenados a entenderse debido a las circunstancias en las que se encontraban. Se matizaron algunos aspectos y ambas partes adquirieron el compromiso de hablar del tema a lo largo del curso.

En la entidad de la ribera del Arlanzón están convencidos de que el acuerdo es beneficioso para el fútbol burgalés, aunque también tienen claro que se debe redactar un nuevo documento en el que sería conveniente cambiar alguno de los términos para que esa unión fuera más estrecha.

Entienden que el convenio de filialidad se queda corto en algunos aspectos deportivos y creen que se le debe dar una vuelta. Miguel Ángel Benavente, uno de los dirigentes blanquinegros, habla de «limar» algunos aspectos tanto económicos como futbolísticos. Uno de ellos es el que pueda haber una libre circulación de futbolistas entre los equipos de División de Honor, Segunda RFEF y Segunda División. «Que un juvenil que destaque pueda actuar en el filial y que haya un mayor número de sub-23 en el segundo equipo que puedan echar una mano al Segunda», comenta.

Los mandatarios de ambas entidades dialogarán en próximas fechas para buscar la solución más positiva para ambas partes. Sin las prisas que hubo en el periodo estival, se espera que los pasos que se puedan dar sean firmes y sienten las bases de la relación entre ambos clubes en los próximos años.

Algunos cambios. Del convenio que firmó el Promesas con la familia Caselli ha habido algunos apartados que se han modificado. El Burgos CF abona alrededor de 50.000 euros cada temporada para utilizar las instalaciones de Castañares -en el convenio figuraban 10.000 euros al mes- y también ha asumido la deuda de la pasada campaña. Asimismo, se ha hecho cargo de los pagos de uno de los campos de hierba artificial, mientras que del otro se encarga el Promesas.

Dentro de este acuerdo, el Burgos CF aporta 280.000 euros, que es prácticamente el presupuesto del conjunto de 2ª RFEF. Esta cantidad está incluida en el límite salarial que LaLiga ha asignado al Burgos CF. Además, tres de los jugadores que forman parte de la plantilla del filial son propiedad de la entidad que preside Rodrigo Santidrián, el guardameta Óscar López y los jóvenes Iván Serrano y Pol Bassa. Antes de que comenzara la temporada, Michu habló con el cuerpo técnico del Promesas para ver si podrían cuadrar en su equipo. De las fichas de estos jugadores se hace cargo el conjunto blanquinegro.