Ojo Guareña pulveriza su techo estival con 22.500 visitantes

A.C. / Ojo Guareña
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El mayor atractivo turístico comarcal vuelve a demostrar el buen momento del sector, con un ascenso del 19% respecto al pasado verano y 3.600 entradas más

Uno de los grupos de turistas en la cueva y ermita de San Bernabé, en Ojo Guareña. - Foto: DB

Cuando dejará de crecer la estadística de visitantes de la cueva y ermita de San Bernabé en el monumento natural de Ojo Guareña sigue siendo una incógnita, porque año tras año pulveriza los registros del anterior. Si los datos del pasado verano, el que atrajo a un buen número de españoles al mundo rural huyendo de la masificación y de la pandemia, fueron espectaculares, más lo son los del que acaba de concluir con 22.492 visitantes entre junio, julio y agosto frente a los 18.909 del pasado estío. El mejor junio, el mejor julio y el mejor agosto de la serie histórica desde 1996 se han dado cita este verano con 4.602, 6.803 y 11.087 visitantes, respectivamente. En los mismos meses de 2021 y por el mismo orden subieron a 2.787 (aún con restricciones por la Covid), 6.236 y 9.886.

Clara López de San Vicente, coordinara del equipo de seis personas que trabajan en las cuevas turísticas de la Merindad de Sotoscueva (San Bernabé y Palomera) mostraba su alegría por estas cifras, pero más aún por las de la pasada primavera, también muy superiores a las de años anteriores, y por la desestacionalización de los visitantes que desde el pasado mes de abril proliferan cada vez más de lunes a viernes y ya no se concentran solo en los fines de semana. «Antes, un día entresemana de primavera o de septiembre era habitual contar con apenas 20 personas y ahora siempre superamos el centenar e incluso hemos llegado a las 400». Solo el dato del 1 de septiembre ya es elocuente para López de San Vicente con 172 personas, a pesar de ser un jueves.

En lo que va de año, San Bernabé ya suma 39.558 y es evidente que superará con mucho los 41.662 visitantes de todo 2019, el último año con registros dentro de la normalidad, dadas las restricciones de aforo a que obligó la crisis sanitaria. Así, los pasados meses de abril y mayo también son los mejores de la serie histórica. La cueva ha abierto de forma ininterrumpida, desde la mañana a la tarde los sábados y domingos y en horario partido, de lunes a viernes, aunque aumentando muchas veces el horario matutino para evitar dejar sin entrada a muchos turistas, aunque en muchas ocasiones ha sido inevitable, como admite la coordinadora.

Los días punta del verano fueron el domingo, 14 de agosto, con 600 entradas, y el 18 de agosto, con 493. En julio, el mejor registro se alcanzó el día 23 con 372 turistas. En julio y agosto, los madrileños subieron al podio con un 17% del total, seguidos de los vizcaínos, el 16%, y los propios burgaleses, el 12%. Pero también entraron en San Bernabé 1.000 valencianos, 1.541 barceloneses o 777 sevillanos, además de notarse un aumento del turismo extranjero que aún no se ha cuantificado con exactitud.