El rector insiste en que Medicina depende de los políticos

B.G.R.-C.M.
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Manuel Pérez Mateos asegura que solo siete campus públicos de España no imparten este grado. Reconoce que «no ve muchas intenciones» en la Junta para concederlo a la Universidad de Burgos y apunta al «peso» del nombre de Salamanca

El rector de la UBU reconoce que «no ve muchas intenciones» en la Junta para conceder el grado de Medicina a la Universidad de Burgos. - Foto: Jesús J. Matías

La limitación de los tiempos de intervención, que no de las preguntas posteriores, hizo más ágil que en anteriores ocasiones la celebración ayer del Pleno del Claustro de la Universidad de Burgos, donde se puso encima de la mesa la histórica reclamación del grado de Medicina que ha vuelto recientemente al debate público y político. La novedad respecto a su solicitud pasa por la remisión de la memoria del mismo el 24 de enero a la Consejería de Educación, tal y como esta reclamó a la UBU como paso previo a la convocatoria de la comisión del Consejo de Universidades.

El rector, Manuel Pérez Mateos, detalló a los claustrales los argumentos esgrimidos en dicho informe, si bien comenzó su intervención reconociendo que «no veo muchas intenciones de concederlo» y la terminó aludiendo al «peso» de la Universidad de Salamanca, que sí que oferta este título junto a la de Valladolid. Además de resaltar la capacidad para formar profesionales de los tres hospitales de la provincia, puso de relieve que Burgos se encuentra entre las siete universidades públicas del país que no cuentan con estas enseñanzas de las 50 existentes. Se trata, según señaló, de los campus de A Coruña, Vigo, Alicante (lo «impartirá en breve), Carlos III de Madrid, donde lo ofertan siete instituciones entre públicas y privadas, La Rioja y León. «Diría que somos la única comunidad autónoma que no tiene implantada Medicina en su totalidad de campus», subrayó.

Junto a este mapa de facultades españolas, que responde a un argumento más para la comunidad universitaria, Pérez Mateos hizo referencia a otros «datos consistentes» que evidencian esa necesidad para la sociedad. «Faltan médicos y, aunque se incremente el número de egresados, vamos a estar todavía por debajo del número de plazas MIR que tenemos», exponiendo las 735 vacantes que se asignaron a la Comunidad frente a los 360 nuevos titulados que salieron de las dos facultades el curso pasado. Además, incidió en que la implantación de más grados permitiría «fijar población en el territorio», ya que una buen parte de los médicos residentes se van a otras regiones. 

Pérez Mateos fue contundente y aseguró que la creación de un grado de Medicina es «una decisión política, ni más ni menos», además de que consideró que otras autonomías «han apostado por concederlas a todas sus universidades públicas y aquí en Castilla y León, no se ha hecho». Una afirmación a la que añadió la reflexión de que «no sé si será porque el peso del nombre de Salamanca es excesivo o, al menos, así lo es en el Gobierno que actualmente nos rige». 

El debate en torno a este grado lo propició la Comisión de Política Universitaria, órgano de participación del Claustro en la gestión de la UBU, que tanto en su informe como en el debate posterior solicitó al rector que aportara información sobre la pertinencia de este título de una «forma sólida, más allá del tono reivindicativo».