José María Alonso Jalán con una imagen de la ciudad desde lo alto, con las agujas de la Catedral sobresaliendo, fue el primer pintor en ganar el Concurso de Pintura Rápida Catedral de Burgos organizado por la Fundación AXA en 1996. Una estampa del interior del templo gótico de Manuel Castillero se llevó el reconocimiento en 2022, la última edición del certamen teniendo en cuenta el paréntesis de los dos años de pandemia. Otros veintitrés pintores y pintoras fueron reconocidos a lo largo de estos veinticinco años, con imágenes de la Seo y del entorno más cercano de la ciudad, desde el interior del Patillas a la cafetería del Fórum, pasando por perspectivas del río, horizontes de los campos de Castilla o el monasterio de San Juan.
Esos vienticinco cuadros se exponen hasta el 28 de mayo en la sala Valentín Palencia de la Catedral, recordando los 25 primeros premios otorgados en un concurso al que se han inscrito 12.000 participantes y un millar de obras han sido seleccionadas. Con este certamen, la Fundación AXA se comprometió a colaborar con la restauración del templo gótico: "El concurso se creó al intentar contestarnos a una pregunta: ¿cómo podíamos contribuir en la rehabilitación de la Seo? El certamen nos permitía ese objetivo y también hacerlo de la mano de los burgaleses. La idea funcionó y muy bien", ha recordado esta mañana Josep Alfonso, director general de la Fundación AXA, haciendo mención también al papel de los voluntarios y al del jurado para convertir el concurso "en el primero del circuito del país".
En la exposición comisariada por Pepe Carazo se puede repasar esa trayectoria en la que ha habido tres artistas que han recibido el premio en dos ocasiones: Javier Torices (en 2009 y 2019), Charles Villeneuve (en 2010 y 2013) y Manuel Castillero (en 2017 y 2022); que ha contado también con presencia local (en la inauguración han estado presentes Sebastián Velasco y Álvaro Antón); se han premiado obras en técnicas diversas como grafito, acuarela, acrílico, óleo o collage, y ha habido todo tipo de temáticas y estilos, con predominio eso sí de la figuración. El concurso, en definitiva, ha permitido "descubrir nuevos talentos y servir de trampolín para los artistas", como ha mencionado Pepe Carazo.
Por último, el vicario general Carlos Izquierdo Yusta ha destacado "las perspectivas que miran al horizonte y los cuadros abiertos", haciendo una metáfora de "la mirada al futuro" que representa el certamen.