La adquisición del edificio supondrá poder aumentar un tercio la superficie actual de la sede. La superficie mide unos 100 metros cuadrados y esperan poder incluir hasta cuatro plantas (dos en altura y un sótano), por lo que calculan en 400 metros cuadrados la futura ampliación. De momento tanto el presidente de la Fundación Atapuerca, Antonio Miguel Méndez Pozo, como los vicepresidentes y codirectores de las excavaciones, Juan Luis Arsuaga, Eudald Carbonel y José María Bermúdez de Castro, han comentado que deberán estudiar el uso que se le dará en el futuro, pero la intención es dedicarlo a actividades culturales y científicas y dejar la actual sede para la parte administrativa.

En la zona a ampliar se ubicaría, por ejemplo, el fondo documental de Emiliano Aguirre, que consta del archivo científico y la biblioteca del primer director de las excavaciones: manuscritos, notas, revistas, dibujos, colección de fósiles, etc. También sería el espacio destinado a albergar el fondo fotográfico de José María Bermúdez de Castro, que lo acaba de donar a la Fundación Atapuerca. Se trata, en este caso, de más de 3.000 fotografías que el codirector ha realizado con su propia cámara desde 1983, así como imágenes de Mariano Bautista.

Por otro lado, la reunión del patronato ha servido para conocer que se han aprobado las cuentas del ejercicio 2018 y que, por segundo año consecutivo, tienen superávit. De los 17.000 de 'beneficios', 13.000 se han destinado a reservas voluntarias y el resto al excedente negativo. Las cuentas de este ejercicio, según ha adelantado Méndez Pozo, han sido revisadas por una auditoría y con ellas se ha dedicado el 98% a los fines de la fundación.