El alcalde de Sedano, Igor Herrán, dio la voz de alarma sobre un nuevo recorte de servicios de Alsa en la provincia, que sin previo aviso dejó a todas las localidades de la ruta de la Nacional 623, desde Arija hasta Mata, pasando por Soncillo, Covanera o Quintanilla-Sobresierra, descontectadas con la capital burgalesa. La compañía de autobuses ha confirmado a este periódico que se trata de una «suspensión temporal» y que tiene previsto reanudar esta línea el lunes, 28 de septiembre.

Javier Perujo, alcalde de Orbaneja del Castillo, recalca la necesidad de contar con este autobús al menos un día a la semana, porque permite fijar población. «Me consta que sí es utilizado por vecinos que pueden seguir en el pueblo porque les permite ir al menos una vez a la semana a Burgos a hacer compras y gestiones, al igual que el que usan los miércoles a Sedano para acudir al médico», detalla.

La pandemia se ha llevado por delante muchas rutas que, como esta, resultan imprecindibles para la supervivencia de los pueblos. En el mejor de los casos, las concesionarias las van recuperando con cuentagotas y no sin la presión de vecinos y Ayuntamientos. Tal es el caso de Medina de Pomar, que consiguió que se reestableciera el servicio dominical tras demostrar la demanda existente fletando autobuses con dinero municipal. En Poza, Oña y Trespaderne están a la espera de la decisión definitiva de Alsa sobre la ruta hacia Burgos.

Carretera BU-514. Herrán incluyó la supresión de este autobús en la lista de asuntos que este martes abordó en su reunión con el delegado de la Junta en Burgos, Roberto Saiz, si bien la del transporte colectivo por carretera es una competencia que atañe al Estado y no a la Administración regional.

También hablaron de otras comunicaciones, en concreto del estado de la BU-514, que sí es de titularidad regional y que demanda una actuación para ensachar la calzada. »Se ha ido echando aglomerado, capa sobre capa, y en algunas zonas hay hasta medio metro de cuneta», explica el alcalde, para resaltar el peligro de vuelco, como le ha ocurrido ya a algún camión.

El año pasado se acometió una mejora en las inmediaciones de Sedano pero se limitó a rellenar con zahorra las márgenes de la carretera, de tal manera que los peatones tienen más seguridad, «pero no los coches», insiste Herrán, para quien la actuación debe abarcar los 15 kilómetros de vía, en su mayoría tramos rectos.