Episodios de calor extremo como el que sufrió la práctica totalidad del país entre el miércoles y el domingo de la semana pasada son absolutamente excepcionales. El mercurio se disparó, en el caso de la provincia de Burgos, hasta niveles pocas veces vistos, mientras que en Montoro (Córdoba) se batió la máxima histórica en España con 47,4 grados.

Esta anómala situación, que no obstante se repite cada vez con más frecuencia, es una de las consecuencias de las que se alerta en el último informe del Observatorio de la Sostenibilidad. El organismo ha publicado un completo estudio en el que, tomando como referencia la media de temperaturas del periodo 1981-2010, alerta del aumento en todas las capitales de provincia. Es más, se atreven incluso a predecir, empleando el escenario RCP 8.5 -resultado probable si la sociedad no realiza esfuerzos concertados para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero-, cuál será la variación térmica en 2050.

Todos esos modelos dejan malas noticias para la provincia de Burgos. Empezando por el último, la situación del mercurio dentro de aproximadamente tres décadas, el promedio de temperaturas será 2,7 grados superior al actual. En estos momentos, según el Observatorio de la Sostenibilidad, la media es de unos 11,2 grados. Pues bien, de cumplirse los augurios del organismo, los termómetros alcanzarán los 14 de promedio. «Son datos previstos en el peor de los escenarios, aunque está claro que el cambio climático es ya una realidad en Burgos», explicael Doctor en Ecología Fernando Prieto, uno de los autores del estudio. 

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