Cristina Ruiz confirmó en el Campeonato de España celebrado el pasado domingo en Ortuella que es una de las mejores atletas españolas del campo a través. Revalidó la medalla de plata que consiguió la pasada campaña e incluso atravesó la meta con esa incertidumbre de saber qué hubiera pasado si la carrera hubiera tenido medio kilómetro más. «Llegué con la sensación de que igual hubiera sido posible el oro porque en la última vuelta recorté mucho, aunque nunca se sabe», señala.

Ha pasado página y ya tiene la mente en el Campeonato del Mundo, que se celebrará el próximo 18 de febrero en la localidad australiana de Bathurst situada a unos 200 kilómetros al oeste de Sidney. Será su primera cita mundialista en categoría absoluta, aunque ya estuvo en 2017 como sub 20 en Kampala (Uganda), además de haber disputado cuatroEuropeos en la misma categoría. La Federación confirmó el martes su convocatoria, aunque su presencia era segura después de la plata en el Nacional.

«Es un premio poder estar en un Mundial, porque es cada cuatro años y no hay muchas oportunidades. Es un gran viaje y una recompensa a la temporada de cross. Sumaré una nueva internacionalidad, que es también algo importante», señala.

Sabe que las opciones de estar adelante en la prueba australiana son «escasas», aunque se marca otro tipo de metas en la exigente prueba internacional. «Quiero competir lo mejor posible y disfrutar de la experiencia. Siempre gusta correr junto a las mejores y  a la hora de hablar de resultados, me guiaré por las españolas. Trataré de  demostrar que estoy a la altura de las mejores», responde.

En estos días previos al Campeonato del Mundo se dedicará a entrenar y preparar la carrera de la mejor forma posible. Entiende que aún tiene margen de mejora, por lo que confía que su estado de forma en Bathurst sea incluso aún mejor que en Ortuella. «El Nacional era el gran objetivo de esta campaña de cross porque es donde te lo juegas todo, aunque creo que aún puedo mejorar un poco», explica.

Lo que toca ahora es recuperarse del esfuerzo que supuso un Campeonato de España muy condicionado por el estado del circuito, con enormes charcos y mucho barro. «En las carreras con barro, con pendientes y que sean duras siempre me he desenvuelto bien. Sé medir bien las fuerzas y gestionar la carrera. Pero esta prueba era otro nivel, nunca había corrido con tanto barro. Se compitió a un ritmo muy bajo porque había zonas que casi no se podía correr», explica.

Temporada al aire libre. Una vez que dispute el Mundial la campaña de cross habrá llegado a su fin y Cristina Ruiz ya tiene puesta su mirada en la pista al aire libre. El 5.000 será su distancia y tratará de consolidarse en la elite nacional y seguir dando pasos hacia adelante. «Mi objetivo es preparar bien el 5.000 y hacer una buena marca. Este año hay Mundial al aire libre y la marca es muy exigente (14,52), pero quiero estar lo más cerca posible de esa mínima. Quiero seguir mejorando en la distancia», comenta Cristina Ruiz.

La cita más importante en verano volverá a ser el Nacional, en el que buscará un sitio entre las mejores, aunque sabe que para eso aún queda mucho. Su meta es la mejora continua y es que entiende que aún no ha tocado techo y que su nivel puede seguir creciendo. «Soy joven y tengo margen y quiero dar un paso adelante cada año. Quiero seguir entre las mejores, que me respeten las lesiones  y seguir progresando», concluye.