Un estudio elaborado por especialistas del Servicio de Neurofisiología Clínica del Hospital Universitario de Burgos concluye que el uso del electroencefalograma (EEG) urgente, fuera de la jornada laboral ordinaria, mejora la calidad asistencial, ya que evita procesos médicos innecesarios hasta en un 63% de los pacientes.

Los neurofisiólogos del HUBU, especialistas que se ocupan del estudio funcional del sistema nervioso, cuentan con una amplia experiencia en la realización de EEG, un tipo de exploración complementaria que registra la actividad bioeléctrica cerebral, cuya disponibilidad 24 horas al día, 365 días al año, no es accesible en muchos centros hospitalarios.

Se emplea principalmente en crisis epilépticas y alteraciones del nivel de consciencia y su resultado es decisivo para indicar el ingreso en hospitalización convencional o en UCI, así como para emplear fármacos antiepilépticos. Cuando se realiza en horario de guardia permite además tomar decisiones terapéuticas una media de 31 horas antes con respecto a la realización solo en horario laboral ordinario. Este ahorro de tiempo es de vital importancia en algunas situaciones neurológicas urgentes, como el "estado epiléptico", en el que el tratamiento precoz puede evitar un daño neuronal irreversible.

Los resultados de este estudio, junto con otras aportaciones sobre seguimiento posquirúrgico de lesiones medulares de origen artrósico, la monitorización del sistema nervioso durante la cirugía y sobre patología del sueño, se van a presentar en la LVIII Reunión Anual de la Sociedad Española de Neurofisiología Clínica (SENFC). Este congreso, que tendrá lugar en el Fórum Evolución la semana que viene, ha sido organizado por el Servicio de Neurofisiología Clínica del HUBU, cuya responsable, la Dra. Ana Gómez Menéndez, preside su Comité Organizador.