¿Descansa en paz Cristóbal de Haro?

I.L.H.
-

La restauración del sepulcro del comerciante que financió la primera vuelta al mundo revela que los restos de él y los de su mujer no están en su tumba.

Los sepulcros de Cristóbal de Haro y su mujer, Catalina de Ayala, acaban de ser restaurados. - Foto: Alberto Rodrigo

«Aquí yacen los señores Cristóbal de Haro: factor de la majestad del emperador, Carlos Quinto, de la Casa de la Contratación, de la Especiería y Regidor de Burgos. Patrón de esta capilla, y doña Catalina de Ayala, su mujer, falleció él en el mes de noviembre del año de mil e quinientos e cuarenta i un años, y ella en el mes de octubre del año de gracia de mil e quinientos e cuarenta i seis. Dejaron dotadas en esta capilla cinco misas rezadas cada semana con sus responsos. Requiescant in Pace. Amén». 

Esa leyenda, que una vez restaurada se puede leer con cierta facilidad, custodia el sepulcro de la iglesia de San Lesmes que pertenece al matrimonio que financió la expedición con la que Magallanes y Elcano consiguieron dar la primera vuelta al mundo. Pero a juzgar por  lo que ahora sabemos quizá solo sea eso, una leyenda.

(Más información en la edición impresa de Diario de Burgos de hoy viernes o aquí)