La Concejalía de Comercio confirmó a finales de marzo el lanzamiento de la tercera campaña de bonos al consumo, que irá destinada a este sector, así como a la hostelería y a centros deportivos.  El trabajo de preparación de la misma comenzó desde entonces al confirmarse los dos millones, procedentes de remanentes, que se iban a invertir en la iniciativa, según avanza la concejala del ramo, Rosa Niño.

No obstante, manifestó que se está a la espera de recibir el visto bueno de Intervención para poder sacar a concurso la plataforma que gestionará tanto el canje y la compra de los vales, como la adhesión de los establecimientos participantes.

A la espera de ese trámite administrativo, Niño mantiene los plazos inicialmente propuestos para su puesta en marcha, que previsiblemente se desarrollará en el mes de septiembre. En cuanto a posibles cambios de la misma, estos se ceñirán a cuestiones relacionadas con esa gestión para mejorar su funcionamiento, pero no a su contenido y concepción. Al respecto, el presidente de Centro Burgos, Raúl Martínez, defiende mantener los bonos de 10 euros en el sector, de tal forma que seis aporta el consumidor y cuatro el Ayuntamiento, al tratarse de una cantidad fácilmente canjeable en las tiendas.

El grueso de los dos millones de euros irán para el comercio, si bien la concejala no entró a detallar qué cantidad será la definitiva, aunque destacó el beneficio que supone para los ciudadanos. El resto se destinará a otros colectivos también castigados por la pandemia, como son la hostelería y los gimnasios o centros deportivos.

Las polémicas banderolas. En los bonos al consumo todas las partes están de acuerdo, no así en otras cuestiones como la prohibición de colocar decoración o publicidad en el exterior de las tiendas del centro, cuya eliminación recordó la concejala a finales del año pasado. De hecho, Centro Burgos no pudo colgar de las farolas sus tradicionales bandeloras de la feria de estocaje por este motivo, lo que despertó las críticas contra en Ayuntamiento. Sobre este aspecto, Niño se refirió a las reservas que existen por parte de técnicos municipales, aunque anunció que se trabaja en ofrecer una «solución» a los comerciantes para que esa ornamentación exterior sea acorde con el entorno.