Una de cal y otra de arena. Así se podría resumir el anuncio que ayer hizo el Ministerio de Transportes en relación al tramo de la A-12 entre Ibeas y Burgos. La buena noticia es que -por fin- se ha iniciado el concurso para redactar la terminación del proyecto de construcción del enlace entre el municipio del Alfoz y la capital. La mala, que la elaboración del texto final, una vez se adjudique, se prolongará durante los siguientes 24 meses.

Estos plazos abocan al Gobierno a no tener en sus manos el documento hasta, como mínimo, bien entrado el próximo 2024. Todo ello si la licitación transcurre con normalidad. De este modo, y de iniciarse el concurso para su construcción inmediatamente después de recibir el proyecto, este tramo de autovía podría no ser una realidad hasta mínimo mediados de 2027, ya que el anterior documento calculó unos trabajos de ejecución de cerca de 30 meses.

En total el Ministerio desembolsará 1,2 millones de euros para que una consultora o ingeniería complete el proyecto: consta de 7 kilómetros de longitud y debe resolver cuestiones no previstas en el primigenio como la desaparición de las cabinas de peaje de la AP-1 y otras como la actualización de la normativa técnica vigente. El presupuesto total aproximado que calculan desde Transportes, aunque este quedará más claro una vez se conozcan los pormenores del proyecto, asciende hasta los 91 millones de euros. Son 7,3 más que los 83,7 por los que salió a licitación en abril de 2016.

Largo y tortuoso camino (...).

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