Hontanas pretende ser referente del turismo rural

I.P.
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La localidad amplía sus plazas para peregrinos y turistas con la apertura del remodelado y ampliado albergue privado que ofrece además servicio de spa, salas sociales y restaurante

En verano, la zona de terraza del bar es un auténtico lujo. - Foto: Patricia

Con una decena de albergues y establecimientos de hostelería, la localidad de Hontanas es un referente en el Camino de Santiago que cruza territorio burgalés. Ahora, mira más allá de los peregrinos y quiere atraer a otro tipo de visitantes y turistas con un nivel económico mayor que el que disponen los caminantes jacobeos en su mayoría. 

Con ese objetivo inició en 2013 el proyecto de ampliación de uno de sus albergues en Hontanas el empresario Félix Rodrigo, quien bastantes años antes decidió invertir «lo que gané trabajando en Cuba», dice él mismo, en la localidad de la que se prendó después de hacer en tres ocasiones el Camino de Santiago. Así, fue adquiriendo inmuebles y abriéndolos como albergues y hostal rural, cuatro en total, así como otros edificios; en uno de ellos residen varios de los empleados foráneos que tiene contratados para sus establecimientos. 

Otro de los inmuebles lo compró en 2013 para ampliar el albergue Santa Brígida-Yepes, lo tuvo que derribar para alzarle con nueva planta, en la que destaca la fachada con los materiales originarios, piedra, adobe y madera. 

Ahora, tras superar varios problemas urbanísticos con Patrimonio, el nuevo Santa Brígida- Yepes ofrece sus servicios a peregrinos en la parte del albergue desde hace semanas y se dispone a abrirse igualmente al turismo rural.

Su instalación estrella es el spa, con dos saunas, un espacio para la relajación, que se conecta con un jardín para disfrutar de la naturaleza y el aire libre, donde además destaca su decoración con grandes vasijas, también distribuidas con gusto por todo el inmueble y que han sido diseñadas y elaboradas exclusivamente para este establecimiento por el artista Delso Martínez, imprimiéndolas un carácter muy rural con tonos tierra.

El spa, que está acabando de llenarse para abrir ya mañana sábado, ocupa la parte nueva de la ampliación, donde también hay una sala que se piensa destinar a ofrecer servicios de enfermería, masajes, hidroterapia y otros cuidados del cuerpo y de la mente en una oferta que quiere llegar, primero a la comarca Odra-Pisuerga, e igualmente a todos los usuarios que deseen disfrutar de este atractivo servicio, cada vez más demandado por visitantes y peregrinos, éstos después llegar a los albergues cansados tras horas de caminar. 

En su deseo de potenciar Hontanas como un referente de turismo rural, el empresario también ha dotado al nuevo Santa Brigida-Yepes de comedor, totalmente amueblado ya. Félix Rodrigo explica, en todo caso, que de momento no da comidas, y el servicio a los peregrinos se ofrece en el propio bar del albergue. La intención es ver cómo va 'rodando' el establecimiento, afluencia y la aceptación que las nuevas instalaciones tienen, y en función de las necesidades que se vayan viendo y la demanda, se abriría el comedor.

«La idea es no solo que vengan peregrinos, sino atraer a otro público y en ellos hemos pensado al hacer tanto el spa, las habitaciones y el comedor. Tenemos que conseguir que Hontanas no solo viva del Camino sino del turismo rural», explica el empresario que está convencido del potencial que en ese sentido tiene la localidad, y que al igual que a él le atrajo hace décadas, puede atraer a otros visitantes que tienen la oportunidad de visitar las localidades cercanas y conocer su patrimonio; pueblos, incide, que no disponen de esas infraestructuras y servicios de Hontanas. 

Además, los albergues y hostales contribuyen a crear empleo y fijar población en el pueblo. Tal es así que sus negocios son la mayor 'empresa' local, ya que tiene a su cargo 9 trabajadores en este momento, pero que en breve aumentarán, ya que en el spa se contratarán a 4 personas más para cubrir los turnos de mañana y tarde. En este sentido, destaca que el pueblo ha recuperado al médico al haber crecido en población. Además, su plantilla es multinacional, ya que cuenta con trabajadores de lugares tan alejados como Cuba -donde él mismo trabajo tres décadas-, Alemania, Colombia o Marruecos. 

El proyecto de ampliación del albergue ha supuesto una inversión de más de 700.000 euros y ha contado con una subvención del grupo de desarrollo local Adeco Camino de Santiago, ayuda que iba vinculada a la creación de empleo, añade Félix Rodrigo.