Burgos vuelve a convertirse en la capital nacional del Derecho, en esta ocasión con la celebración, los días 31 de marzo y 1 de abril, de congreso sobre la nueva ley Concursal. Un total de 25 magistrados de juzgados de lo Mercantil, audiencias provinciales y del Tribunal Supremo analizarán en Burgos los efectos de la nueva Ley Concursal, que temen que colapsen los juzgados en los próximos meses. Esta legislación, que reforma la anterior, reserva la actuación de los administradores concursales, que sirven de guía en todo el proceso, únicamente a los concursos de las empresas de más de diez empleados. Así, contempla que en el caso de las insolvencias de micropymes -el 95,7% de las sociedades españolas y el 96,3% de las de Castilla y León- no sea necesaria la figura del administrador concursal y traslada al propio deudor la compleja tarea de realizar la gestión directamente ante el juzgado a través de formularios online.
Importantes juristas debatirán sobre las consecuencias de esta reforma en el Congreso sobre Reestructuración e Insolvencia de Burgos, organizado por la empresa especializada en liquidaciones concursales Trademat, los días 31 de marzo y 1 de abril.
Los concursos de acreedores ya experimentaron una subida en 2021 y los expertos esperan una avalancha de solicitudes en los próximos meses ante la coyuntura económica actual teñida por la subida de los precios de la luz y los carburantes, la devolución de los créditos ICO, la conclusión de la prórroga de los ERTE, y la finalización de la moratoria que exime a los deudores en estado de insolvencia de solicitar la declaración de concurso hasta finales de junio. Los concursos de acreedores en Castilla y León aumentaron un 5,3% en el año 2021 con respecto al año anterior, con un total de 138 empresas acogidas a este proceso, según los últimos datos del Colegio de Registradores de España, publicados en febrero. El crecimiento experimentado en la Comunidad es sin embargo bastante más moderado que el anotado en el conjunto de España, donde las empresas declaradas en concurso de acreedores crecieron un 32% en el último año, hasta un total de 6.134. El sector más afectado fue el del comercio y reparación de vehículos, que representa un 19% de las compañías que pasan por este proceso; un perfil que se repite tanto en Castilla y León como en el conjunto nacional.