Simula el robo de un móvil que había vendido por 1.100 euros

DB
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La detenida aseguró en Comisaría de Miranda haber sido víctima de un robo con violencia en la ribera del Ebro, llegando a acudir al centro médico para ser asistida. En la investigación se pudo determinar que los hechos denunciados eran falsos

Imagen de archivo de la Comisaría de Policía de Miranda. - Foto: Valdivielso

La Policía Nacional detuvo el pasado mes de junio en Miranda a una mujer de 36 años por una presunta simulación de delito tras denunciar el robo de un teléfono móvil que, según determinó la investigación, había vendido por 1.100 euros. 

En su denuncia en Comisaría, la mujer relató a los agentes que mientras se encontraba paseando por la ribera del río Ebro, dos varones la habían abordado para sustraerle con violencia su teléfono móvil. La denunciante, que no aportaba ningún tipo de descripción física de los autores de los hechos, presentó en Comisaría un parte de lesiones, sufridas al parecer durante el robo. Igualmente manifestaba que había tenido conocimiento de que otra ciudadana había sido víctima de un robo similar en la misma zona, hechos que no llegaron a denunciarse nunca. Ambos detalles, provocar una asistencia sanitaria simulando lesiones y comunicar que se habían producido más robos en la zona, los ideó la denunciante para dar mayor credibilidad a su historia.

En el marco de la investigación y comprobación de hechos que se realiza con todas las denuncias que se presentan en Comisaría, los agentes localizaron una venta en una plataforma online de ese terminal por la denunciante antes de que, supuestamente, fuese asaltada por los delincuentes. Tras confrontar con la presunta víctima este y otro detalles que no corroboraban su versión de los hechos, pudo determinarse que estos eran falsos y que su objeto era, una vez vendido el teléfono de forma privada a un tercero, defraudar al seguro solicitando el reembolso por robo de un terminal valorado en más de mil euros. De esta forma, obtenía el beneficio de la venta particular y el del reembolso de precio del terminal por parte de la aseguradora.

La denunciante fue detenida y puesta a disposición judicial por una presunta simulación de delito.

Este tipo de fraudes conlleva destinar recursos policiales en investigaciones de delitos que no han existido y generan, además, una alarma social basada en hechos que no se han producido, ya que no tuvo lugar ese robo con violencia ni ninguno de los aspectos que utilizó la denunciante para 'adornar' su historia. Además, en este caso, incluso se realizó una utilización injustificada del sistema de salud para conseguir un certificado médico de una agresión inexistente.

Desde Policía Nacional se recuerda que todas las denuncias que se reciben son investigadas y que la simulación de delitos o la presentación de una denuncia de hechos falsos -normalmente realizadas para solicitar una compensación económica a una compañía aseguradora- acarrean responsabilidades penales.

Igualmente la Administración puede reclamar a los autores de este tipo de delitos una compensación económica por los gastos que se derivan de las horas de trabajo y gestiones de investigación realizadas por los agentes.