Ocho mociones de censura se han presentado en ayuntamientos y juntas vecinales de la provincia en este último mandato. El PP ha sido el partido que más alcaldes ha perdido desde que a mediados de junio de 2019 se conformaron los consistorios tras las elecciones municipales del 26 de mayo, mientras que Ciudadanos (Cs) ha sido la formación que más mociones ha presentado (5 firmadas), apoyándose en varios caso en otros grupos municipales, y a su vez, es la que más beneficiada ha salido, haciéndose con más sillones, como han sido los de Sasamón, Tórtoles de Esgueva, Valdebezana, en una primera etapa, y la pedanía de Valdeajos, perteneciente al Ayuntamiento de Sargentes de la Lora.
Cs no ha perdido, sin embargo, ningún Ayuntamiento desde 2019, aunque lo puede hacer este jueves, día que está previsto que se debata la moción de censura en Rucandio, presentada por el PSOE. Blanca Tubilleja será probablemente de nuevo alcaldesa, relevando a José Antonio González.
En cuanto al PP, perdió los consistorios de Sasamón, Revillarruz, Valdebezana y la pedanía de Arcellares, que forma parte del municipio de Basconcillos del Tozo. Esta última moción ha sido la que se ha llevado más en 'secreto' y no tuvo repercusión mediática. Se presentó hace un par de meses y desde entonces gobierna Álvaro Arroyo (PSOE), tomando el relevo de Eduardo Arroyo, quien fue el candidato más votado en 2019, presentándose por el PP. Esta pedanía tiene alcalde pedáneo y dos vocales.
Para el PSOE la pérdida más dolorosa fue sin duda la del Ayuntamiento de Lerma. En la villa ducal la moción la presentaron el PP y Cs para echar a Miguel Ángel Rojo y aupar a la Alcaldía a la candidata que presentaron los populares, Maribel Sancho.
Los socialistas también perdieron la pedanía de Valdeajos, cuya alcaldesa Iratxe Hilario tuvo que ceder el cargo a Carlos Sainz de Lomas, de Cs.
En las pedanías, al contrario que en los ayuntamientos, cuando hay voto de censura, no son los partidos en pleno quienes deciden, sino que vuelven a ser convocados los empadronados, como también fue el caso de Valdeajos y lo será el próximo jueves en Rucandio.
El PSOE ha presentado tres mociones, las mencionada de Arcellares y Rucandio, y la inscrita conjuntamente con Cs en Tórtoles contra la alcaldesa Pilar Alejos, del PCAS, pero ha sido determinante con sus votos para desbancar a algún otro, como en Revillarruz, donde apoyó al PCAS-TC-Imagina para desalojar de la Alcaldía al PP y dársela al partido castellanista.
DE LA PRIMERA A LA ÚLTIMA. La primera moción que se presentó fue en Valdebezana, en febrero de 2020, y ha tenido dos capítulos. El primero, el de la propia presentación de la recusación, firmada por los dos concejales de Cs y los dos de Iniciativa por Merindades. Salió adelante desbancando al equipo del PP, con tres ediles y con Luis Collado como alcalde. El pacto contemplaba un reparto de la Alcaldía que asumió inicialmente Cs, con Florentino Ruiz como regidor, y que tuvo su segundo capítulo el pasado 9 de noviembre, cuando Juan Carlos Díaz, de Iniciativa por Merindades, tomó el relevo de Ruiz cumpliendo así el compromiso adquirido entre ambos partidos cuando se unieron para presentar la moción. Pocos ayuntamientos como el de Valle de Valdebezana podrán 'presumir' de tener hasta tres alcaldes en lo que llevamos de legislatura.
En la pedanía de Valdeajos se presentó en marzo de 2020; sin embargo no ha sido hasta septiembre pasado, es decir un año y medio después, cuando finalmente se ejecutó al dictar el Juzgado una sentencia obligando a la alcaldesa socialista Iratxe Hilario a convocar el pleno para tramitarla y debatirla. La había presentado Carlos Sainz, el vocal de Cs, que es el nuevo alcalde pedáneo desde el 29 de septiembre, en una más que curiosa sesión hasta con la Guardia Civil pasando lista para controlar los empadronados, en la que votaron 18 vecinos del pueblo. Prosperó la moción con 12 votos a favor y 6 en contra.
En la presentación de las mociones juegan muchos factores, unos son políticos, en los que son las direcciones provinciales e incluso, regionales, las que están detrás de ellas, y en otras, en los pueblos más pequeños sobre todo, a veces se trata de cuestiones personales o familiares. Pero en todos los casos, el revuelo se deja notar y trasciende a los vecinos que en mayor o menos medida dejan patente su postura.
Por el peso de la villa ducal, la moción que presentaron el PP y Cs en Lerma contra el PSOE, dolió en este partido que perdió un importante feudo. Fue en tiempo la tercera, ya que se registró en octubre de 2020 y el PP la justificó por la «falta de proyecto y liderazgo» de los socialistas y en concreto de su alcalde, Miguel Ángel Rojo, después de 16 meses de estar en el gobierno municipal.
Y si los dos concejales de Cs, votándose a sí mismos, alzaron tras los comicios de 2019 a Rojo a la Alcaldía -el PSOE logró 5 ediles, 4 el PP y 2 Cs- finalmente secundaron la moción al año siguiente con los populares y ambos partidos auparon a la candidata azul, Maribel Sancho, entre reproches por parte de los dirigentes provinciales de los 3 partidos, ya que en el camino de Lerma se cruzaron las negociaciones en paralelo PSOE-Cs por el Ayuntamiento de la capital burgalesa.
Finalmente, ante el plante de los ediles del PP y Cs en Lerma, amenazando con abandonar sus partidos, ambas direcciones provinciales avalaron la moción. Desde el 1 de octubre de 2020, Maribel Sancho es la regidora de la villa.
Ninguna de las mociones está exenta de sus singularidades. En Revillarruz la presentó en diciembre de 2020 el PCAS-TC, que contó con el apoyo del PSOE para echar al PP de la Alcaldía. Lo curioso es que el bastón de mando fue a para a Beatriz Martí, del partido castellanista, que ni siquiera se había presentado a las elecciones. La designó el partido al renunciar toda la candidatura que encabezaba su marido.
Los socialistas y castellanistas se unieron para desbancar al regidor, el popular Santos Manuel Hernando. Este había contado precisamente con Martí para gobernar hasta ese momento y romper el empate a 3 concejales con el PSOE. El día a día fue minando la confianza de Beatriz Martí y tanto ella como el PSOE argumentaron que su pacto iba más allá de las siglas y los intereses propios de cada grupo, «aparcamos nuestras diferencias ideológicas», explicaron, y añadieron que su acuerdo se forjaba en «un sentido de responsabilidad que exige confianza, respeto, diálogo y entendimiento».
Tórtoles de Esgueva vivió la moción contra su alcaldesa, Pilar Alejos, del PCAS, en un ambiente de tensión y el nuevo alcalde asumió el cargo en el mes de abril pasado entre el abucheo popular. En esta localidad de la Ribera del Duero, Cs y PSOE unieron sus fuerzas y presentaron una moción que alzó a la alcaldía a Fernando Delgado, de la formación naranja, en un pleno donde no faltaron las protestas de los tortolicos que no ahorraron calificativos de «vergonzoso» y «caciquismo» para describir lo sucedido, y que no dejaron de gritar ¡fuera, fuera! al nuevo alcalde tras su proclamación en un pleno donde estuvo la Guardia Civil ante la posibilidad de enfrentamientos. Muchos expresaban su pesar porque situaciones de esta índole «dividían un pueblo hasta entonces unido».
Los ediles naranjas y socialistas, por su parte, acusaron a la alcaldesa de «talante autoritario» y de «falta de diálogo».
Otra de las localidades que se ha visto salpicada por los enfrentamientos entre los grupos municipales ha sido Sasamón. Tras los comicios de 2019 se alzó con la Alcadía el PP, con Amando Calzada al frente -pese a que solo había conseguido 2 concejales- gracias al apoyo de los 2 de Vox, relegando a la oposición a Cs que ganó las elecciones con 3 representantes. Buena parte de la legislatura se desarrolló sin problemas entre los socios de gobierno; de hecho Marianela Manrique, de Vox, fue nombrada teniente de alcalde, cargo al que renunció tras distintas desavenencias que dieron al traste con el pacto. El desencadenante final para que Cs presentase la moción se vivió en el pleno en el que el alcalde se quedó solo -sin el apoyo de su concejal- en su propuesta de cambiar el sistema de reparto y gestión de impuestos de las pedanías. Calzada dijo entonces (mayo de 2021) que dimitiría, lo que no llegó a hacer. Finalmente, Cs registró la recusación con el apoyo de Vox y desbancaron al regidor popular en un pleno celebrado el pasado 10 de julio.