La victoria del Mirandés en El Sardinero tiene un valor enorme porque le 'robó' tres puntos en su propia casa a un rival directo por la permanencia como el Racing de Santander. Además, puso fin a una racha de nueve meses sin ganar fuera de casa y reforzó la línea ascendente de las últimas semanas.

En una jornada en la que los seis últimos clasificados se enfrentaban entre sí, sumar un triunfo era capital para alejarse de la zona de peligro de la clasificación. El conjunto de Joseba Etxeberria se reencontró consigo mismo a domicilio y se colocó con 20 puntos, lo que se deja en decimoséptima posición con cinco unidades de margen sobre el descenso. Precisamente, esa línea roja la marca el Racing, que destituyó a su entrenador después cinco tropiezos consecutivos.

También sacó adelante su partido la Ponferradina frente al Lugo, dos equipos que han comenzado con muchas dudas y que han cambiado de inquilino en el banquillo por el camino. Los bercianos se repusieron de su derrota contra el Burgos CF ganando por la mínima con un tanto de José Naranjo. Ese triunfo permite al equipo de David Gallego salir del descenso y colocarse a solo dos puntos del Mirandés, al que visitará Anduva el próximo sábado a las 16.15 horas. Será otro duelo directo por la salvación que cerrará 2022 para ambas escuadras. No obstante, los rojillos afrontarán en el inicio de 2023 otros dos encuentros cruciales en su objetivo contra el Real Zaragoza y el Lugo, dos equipos que están cerca de ellos en la tabla. Los gallegos son antepenúltimos con los mismos puntos que el Racing.

En el tercer compromiso de la parte baja, se midieron el Ibiza y el Málaga, el último contra el penúltimo, y el choque se saldó con un empate (1-1) que no satisfizo a ninguno de los dos. Ambos siguen en el fondo de la tabla con solo 16 puntos después de 20 jornadas.

Aparte del impulso a nivel clasificatorio, la victoria en El Sardinero sirvió al Mirandés para olvidarse de la maldición que le perseguía como visitante en la Liga SmartBank, ya que no ganaba desde el 19 de marzo contra la Real Sociedad B. Esta vez los pupilos de Etxeberria hicieron alarde de su talento en la línea ofensiva y tuvieron la eficacia que les había faltado en otras ocasiones. Castigaron en las pocas oportunidades que tuvieron al Racing de Santander que, precisamente, pecó de falta de contundencia en las dos áreas.