La renovación de Alfonso Herrero cada vez está más complicada. El portero toledano no acaba de responder de forma afirmativa a la propuesta del Burgos CF y los responsables deportivos blanquinegros asumen que cada vez está más lejos, aunque tampoco descartan que las circunstancias puedan dar un giro y su continuidad se encarrile.

Es uno de los integrantes de la plantilla con el que más pronto comenzó a hablar la dirección deportiva y mucho antes de que concluyera la temporada ya había negociaciones entre ambas partes. Parecía factible que llegara el entendimiento, aunque con el paso de las semanas las posturas no acaban de encontrarse y a día de hoy parece difícil que Alfonso continúe, aunque no imposible.

La intención de Michu es la de cerrar a dos porteros en esta semana para que comiencen a trabajar el próximo lunes 4 de julio con el equipo. La dirección deportiva está convencida de que puede acabar esta semana con esa pareja de cancerberos con la que empezará a trabajar Julián Calero.

De momento el mercado sigue más parado de lo esperado y el Burgos CF continúa atento a los movimientos que se producen. Sabe que es uno de los equipos de la cola en cuanto a potencial económico y es consciente de que primero mueven ficha los de mayor presupuesto y posteriormente lo hace el resto.

Loïc Badiashile. Es uno de los portero que está barajando el Burgos CF para incorporar a su plantilla. Se trata de un francés de 23 años que la pasada campaña formó parte de la plantilla del Internacional de Madrid, equipo en el que disputó 15 encuentros en la Primera RFEF. Es una apuesta de futuro que, en principio, sería el tercer portero del equipo de LaLiga SmartBank y el que jugara en el filial cuando no le hiciera falta a Julián Calero (...).

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