El Servicio Municipalizado de Movilidad y Transportes (Smyt) del Ayuntamiento de Burgos ha estimado, total o parcialmente, alrededor de 40 alegaciones de las 193 presentadas al Plan de Movilidad Urbana Sostenible de Burgos (PMUS). Aunque el número de las propuestas aceptadas podría hacer pensar que ha existido una gran sensibilidad a introducir cambios por parte del equipo de Gobierno, la realidad es que todas las ideas que venían a sugerir cambios en el fondo han sido rechazadas. Entre otras, las relacionadas con un nuevo planteamiento de la zona azul, en el que el Ejecutivo local se mantiene firme en su planteamiento de que, más tarde o más temprano, encarezca sus tarifas y se extienda a nuevos barrios de la ciudad como Gamonal, Vadillos o Río Vena.

Cabe recordar que el contrato de la ORA afronta su recta final y en los próximos meses tocará preparar un nuevo pliego en el que habrá que adoptar decisiones de cara al futuro. Si el equipo de Gobierno se toma en serio el PMUS, el documento que debe marcar la estrategia a seguir en materia de movilidad y que se va a aprobar de manera definitiva en las próximas semanas, deberá adoptar cambios muy notables.

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