La jueza que investiga el envenenamiento de María Isabel Suárez, presuntamente a manos del actor Luis Lorenzo y su pareja, sobrina de la fallecida, ha decidido este viernes mantener la libertad provisional para ambos.

No obstante, según ha informado el abogado de la acusación particular a los medios de comunicación a la salida del juzgado, la magistrada ha mantenido como medidas cautelares la retirada de los pasaportes y la obligación de presentarse semanalmente en este órgano judicial, como ha solicitado la Fiscalía.

Tanto Luis Lorenzo como su pareja, Arancha Suárez Palomino, han acudido a la vistilla celebrada en el Juzgado de Instrucción número 9 del municipio madrileño de Arganda del Rey.

El letrado, que representa a la familia de la anciana fallecida, ha asegurado que el fiscal ha mantenido su petición de que ambos queden en libertad provisional, "pese a que manifiesta que hay indicios de asesinato".

"La posición de Fiscalía no me parece lógica: que para un delito tan grave no se atreva a pedir la prisión provisional. Yo creo que hay material de sobra para que ingresen en prisión", ha dicho.

El representante del Ministerio Público alega que ya se les han impuesto medidas cautelares y que no hay riesgo ni de fuga ni de destrucción de pruebas.

Además, el abogado de la acusación ha apuntado que solicitarán que testifiquen los médicos que recetaron los medicamentos a María Isabel Suárez.

Por otra parte, el letrado de la defensa ha expresado la "alegría contenida" que supone para los investigados la medida adoptada por la jueza, aunque ha llamado a la prudencia a la espera de cómo evolucione el proceso.

También ha considerado que no hay pruebas "contundentes" que determinen que la anciana falleciese por un envenenamiento, pues los informes técnicos "no son sentencias".

"Los informes no pueden decir ni que la causa de la muerte fue por envenenamiento ni quienes fueron los autores", ha puntualizado.

La muerte de María Isabel tuvo lugar el 28 de junio de 2021 en el domicilio de Rivas Vaciamadrid (Madrid) de Luis Lorenzo y su pareja, quienes trasladaron el cuerpo a Asturias para su entierro, momento en el que el hermano de la fallecida sospechó que la muerte podría no ser natural y lo denunció a la Guardia Civil.

La autopsia reveló que la mujer de 85 años falleció por un "envenenamiento" de "etiología homicida", al encontrarle en sangre niveles de cadmio y manganeso 200 y 20 veces superiores a una cantidad normal, respectivamente.