El adelanto de las comidas y cenas navideñas de grupos de amigos y familiares han conseguido animar la hostelería de Miranda de Ebro en un puente largo y atípico. Las reservas en los restaurantes se han multiplicado para estos días, aunque fundamentalmente son de aquellos que viven en la localidad y que han decidido anticiparse a las grandes celebraciones. Unas reuniones que permitirán trabajar a pleno rendimiento durante el fin de semana, ya que la llegada de personas de otros puntos más allá de la ciudad apenas se está notando por ahora.

El pasado fin de semana ya repuntaron las comidas de grupos y de cara a estos días se espera que continúen las reservas previas a las grandes citas. «Estamos teniendo muchas comidas para grupos de seis o diez personas de familias y amigos que se reencuentran antes de la Navidad», afirma Santiago González, del restaurante Duque de Frías. En ese mismo sentido, Rocío Oñez, de Mima Restaurante, reconoce que desde el lunes ya detectaron que paraba mucha gente a comer que iba a pasar estos días de vacaciones a otros puntos del país y con reservas de última hora.

«No se ha notado mucha gente procedente de otras partes», explica Pepe Rey, presidente de la Asociación de Hosteleros de Altamira de Miranda de Ebro. Sí confía en que a lo largo de esta semana se dé una mejoría en este sentido y que más turistas lleguen a la ciudad. Sin embargo, como reconocen desde los propios restaurantes, la mayoría de gente que suele acudir estos días es de la ciudad. «Esto no es Frías, Oña o la capital de Burgos, siempre se trabaja con gente de aquí», manifiestan desde el Duque de Frías, donde también explican que en los meses de octubre o noviembre también han notado más movimiento que de normal.

Este puente tendrá poco que ver con los demás y de ahí lo complicado de realizar previsiones en este momento, pero Pepe Rey sí se cree que el mayor movimiento se dará de cara al fin de semana. «Realmente el puente no ha empezado y al pillar tan mal no sabemos muy bien cómo va a ser», manifiesta, que reconoce que por ahora el tirón se está produciendo gracias a la Navidad y no tanto por el hecho del puente. Los días de diario ha habido menos movimiento, pero los sábados y los domingos la carga de trabajo está aumentando considerablemente.

Para los días festivos de Navidad aún existe «incertidumbre», aunque se espera «trabajar bien porque lo necesitamos». Todavía resulta imposible hacer predicciones de lo que ocurrirá en esas fechas concretas, pero la hostelería confía en que las celebraciones supongan un impulso para el sector.

Dos años sin Navidad. La Navidad se aproxima y por fin se recuperarán las comidas y cenas. La hostelería se convirtió en uno de los sectores más afectados por culpa de la pandemia y eso obligó a cancelar durante dos años consecutivos las reservas en restaurantes de grandes grupos ante la prohibición de reunirse. La mayoría de cenas de empresas se concentrarán alrededor del día 16 de este mes y de ahí que muchas familias y amigos hayan aprovechado esta semana para quedar, como confirma Rocío Oñez, de Mima Restaurante. Explica que ya trabaja con una «normalidad total» después de las múltiples restricciones y se muestra «contenta» ante el volumen de trabajo actual, aunque destaca como cambio de hábito significativo tras la pandemia que ahora hay muchas más comidas.

En el mes de octubre algunos establecimientos ya habían comenzado incluso a recibir reservas y a colgar el cartel de 'completo' para estos últimos fines de semana del año. Y si en 2021 las protagonistas fueron las cancelaciones de última hora ante el temor por el aumento de contagios y las restricciones, ahora parece que la normalidad vuelve a la hostelería y que se podrá disfrutar como antes de estas fechas especiales.