Algunos tenemos fe, dice uno de sus temas, y a su religión se entregaron. Salieron dispuestos a comerse la noche y lo consiguieron. Los cuatro músicos de la banda y Rodrigo Cominero que les acompaña en los directos saltaron, brincaron y contagiaron su entusiasmo y sus rezos a los más de 2.500 espectadores que escucharon el potente directo de Viva Suecia desde el campo de rugby Bienvenido Nieto.  

Salieron arropados por unas pantallas de vídeo que iluminaban el escenario, mostraban el amanecer o lo llenaban de frases. El primero de los rezos de los chicos de Murcia fue una declaración de intenciones: Necesitarnos tanto. Inmediatamente después ya estaba el público cantando en solitario el estribillo de Los años.

Y así se pasaron los cerca de 90 minutos que duró el concierto, dando caña para que el público bailara y se olvidara del frío. Que estuvieran ahí, coreando sus inspiradoras letras sin prestar atención a la temperatura, fue algo que agradeció el cantante, Rafa Val, así como que acudieran a conciertos en unos tiempos en los que muchas bandas desaparecen por falta de apoyos.

Luego entonaron de seguido las favoritas del público como A dónde ir; La voz de presidente; No hemos aprendido nada, que es una de las más recientes y tras la que recordaron lo que acaba de ocurrir en Melilla, o Parar la tierra, que no suelen interpretar en sus conciertos, según nos aseguraba una admiradora del grupo. Y con Rodrigo Cominero en lugar de Leiva que es con quien la cantan en el 'original', entonaron Justo cuando el mundo apriete, para agarrarse a sus fieles. Y así siguieron, con el público demostrando su fe en Viva Suecia.