El Plan de Inspección de Tributos del Ayuntamiento de Burgos, la hoja de ruta que marca los objetivos en la persecución del fraude para el presente ejercicio en materia de impuestos, ha puesto el punto de mira, sin perder de vista al resto de sectores, sobre la construcción y la industria.

En el caso de la construcción son varios los frentes con los que el Plan elaborado por el Servicio de Inspección quiere perseguir el fraude. En relación al pago del Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO), además de comprobar las autoliquidaciones, se detalla que se «realizarán recorridos en calle por todo el municipio con el fin de comprobar» si se han realizado obras sin licencia y así «descubrir hechos imponibles no declarados».

El mundo del ladrillo también será objeto de inspección en relación con el Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE). Aquí, se defiende la necesidad de mirar de cerca «a las sociedades vinculadas a entidades financieras ya que ha crecido el número de inmuebles procedentes de las enajenaciones hipotecarias que se ofrecen en el mercado inmobiliario» y la finalidad es «comprobar que se tribute por la superficie transmitida en las operaciones de venta de inmuebles», incluyendo también las realizadas por estas sociedades de vida relativamente jóvenes.

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