Los portavoces del equipo de Gobierno, Nuria Barrio y Vicente Marañón, han admitido esta mañana en una rueda de prensa previa a la Junta de Gobierno que el Ayuntamiento no tiene competencias para impedir que la próxima Nochevieja se celebre el cotillón en la Sala Andén 56. El bipartito había pedido a los concesionarios de este espacio que anulen el evento y devuelvan el dinero de las entradas a los 900 asistentes y se ha encontrado, según ha relatado la edil socialista, con la negativa de la empresa. Es por ello, por lo que el alcalde, Daniel de la Rosa, ha llamado esta mañana al consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, y al delegado territorial de la Junta, Roberto Saiz, para pedir a la Administración regional que impida la celebración de esa fiesta.

Barrio ha detallado que el alcalde ha pedido solo la prohibición de ese cotillón y no de otros ya que se trata del único que se va a celebrar en una instalación de titularidad municipal.

El equipo de Gobierno entiende que la situación en este momento es distinta a las del 16 de diciembre, día en la que el Ayuntamiento, en virtud del contrato con la empresa que gestiona la sala, organizó con sus medios la llamada Nochevieja Universitaria, a la que acudieron más de 700 personas.

Santiago Mancho, de La Máquina del Ruido, empresa concesionaria del Andén 56, manifestó ayer a este periódico (ver edición impresa) que se encontraba "destrozado" tras conocer que el Ayuntamiento quería impedir el evento dos días antes de la celebración del mismo. 

La concesionaria ha adquirido 900 test de antígenos para realizar a los asistentes al evento entre las 9 y las horas. Aunque tiene un aforo permitido de 1.200 personas, puso a la venta 900. Todas ellas se vendieron por internet.

Barrio ha explicado que el Ayuntamiento, que ya ha anunciado la suspensión de la San Silvestre Cidiana, estudiará en los próximos días sí se mantiene la organización de la cabalgata de Reyes. De momento continúa adelante