La semana pasada, el lunes 14 y el miércoles 16, emitió el Procurador del Común (el Defensor del Pueblo en Castilla y León) sendas resoluciones en las que afeaba lo abultado de las listas de espera del HUBU, pidiendo que «se atienda a la situación del Complejo Asistencial de Burgos, así como las grandes diferencias entre los distintos hospitales [de la Comunidad].

Las dos resoluciones se emiten como respuesta a quejas de pacientes de Traumatología del HUBU; en un caso por una operación de cadera de un paciente que llevaba nueve meses en lista de espera y en el segundo, por otra de rodilla en la que el paciente, «de carácter preferente» llevaba dos años pendiente en el momento en el que el Procurador inició las pesquisas necesarias para la resolución. En sendos casos da la razón a los pacientes e insta al HUBU a agilizar los procedimientos de estas dos personas, que de acuerdo a la normativa vigente tendrían que haber sido intervenidas en plazos máximos de 180 días. Y, como destaca el Procurador, no solo se han incumplido, sino que los pacientes no obtenían la información personalizada sobre su situación a la que tienen derecho.

De ahí que, aun reconociendo los «esfuerzos» que la Consejería de Sanidad está haciendo para encauzar las listas de espera, Tomás Quintana pida que se preste especial atención al servicio de Traumatología del HUBU y al complejo burgalés en general.

Así, demanda que «se adopten medidas oportunas para evitar dilatados tiempos de espera como los que se reflejan en este expediente» y que se den «instrucciones precisas» al servicio de Atención al Paciente para que faciliten «información adecuada y actualizada» a los pacientes.