Vitartis pide un "refuerzo positivo" y fiscal para empresas

SPC
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Pedro Ruiz solicita "visión a largo plazo" a los gobiernos nacional y autonómico, así como menos burocratización y un Plan Agroindustrial que se centre en "la sostenibilidad, la competitividad y la responsabilidad"

Vitartis pide un "refuerzo positivo" y fiscal para empresas - Foto: Rubn Cacho ICAL

El presidente de Vitartis, Pedro Ruiz Aragoneses, apuesta por el "refuerzo positivo más que el negativo" para fomentar las buenas prácticas empresariales y, por ello, solicita a los gobiernos nacional y autonómico incentivos fiscales para beneficiar a las empresas que realicen dichas buenas prácticas en campos como la contratación en el medio rural.

Durante su participación en 'Los desayunos de Ical', el presidente del clúster de la industria agroalimentaria en Castilla y León recordó que en España la presión fiscal es "muy elevada, por encima de la Unión Europea en muchos casos", y que por ello es necesario contenerla.

De hecho, el presidente de Vitartis afirmó que "ni siquiera pido que se reduzcan los impuestos, sino que se beneficie a aquellas empresas que generen buenas prácticas" bajo la premisa de que "con el refuerzo positivo es más fácil que las cosas se mantengan" frente a la idea de apoyar a las empresas a través de las subvenciones, ya que "no siempre ayudan" por el "paternalismo que generan" y porque "gastar podemos gastar cualquiera, lo importante es ser capaces de generar para poder repartir".

Por ello, y especialmente en el mundo rural donde se asienta la industria agroalimentaria por estar "ubicada y comprometida con el territorio" de manera "innegociable", Pedro Ruiz reclamó un "refuerzo fiscal" a través de incentivos que permitan asentar población, ganar tamaño y evitar una carga impositiva que "repercuta de nuevo en las empresas y el cliente".

Los incentivos fiscales son, de hecho, una de las medidas que Vitartis incorpora dentro de su propuesta, enviada a la Consejería de Agricultura, para la elaboración del Plan de Agroindustria de la Comunidad, que desde el clúster de la industria agroalimentaria de Castilla y León se cree que debe estar basado en los tres pilares que sustentan la política de Vitartis: la sostenibilidad, la competitividad y la responsabilidad.

En relación a la sostenibilidad, la propuesta de Vitartis, desgranada por Pedro Ruiz a Ical, incluye desde medidas para la protección del medio ambiente y adaptación al cambio climático a través de la economía circular y la eficiencia en la gestión de los recursos "tanto de agua como energía", a la sostenibilidad económica mediante la circularidad en la logística para "tratar de reducir emisiones"; la formación y el talento para encontrar "perfiles más técnicos y fijar población en el medio rural" con programas como la FP Dual; el apoyo al intra-emprendimiento para generar "crecimiento en las propias compañías"; los incentivos fiscales mencionados para crear "proyectos de vida en el medio rural"; y un cuidado de la cadena de valor, desde la perspectiva de que "el éxito del sector agroalimentario no será sin ir todos de la mano" para conseguir "precios justos" para la producción de la materia prima, la industrialización y la distribución.

Sobre competitividad, Vitartis promueve una mayor innovación a través de la colaboración público-privada porque "la iniciativa está en el sector privado pero los recursos en el público", el desarrollo de la digitalización y la conectividad para llevar infraestructuras adecuadas al medio rural con fondos europeos para no perder "una oportunidad maravillosa de conectarlo", y un dimensionamiento e internacionalización de las compañías, bajo la premisa de que "se incentive el crecimiento empresarial para ganar peso en el mercado".

Por último, el clúster de la industria agroalimentaria de Castilla y León, desde la asunción de la responsabilidad social corporativa para "aportar a la sociedad todo lo que recibimos de ella", también pide a los gobiernos autonómico y nacional favorecer la interlocución, que en todo caso Pedro Ruiz reconoce como "muy buena" con la Junta por tener la Consejería de Agricultura "muy en cuenta" al sector, y una "comunicación positiva" sobre el mismo hacia el exterior, frente a las "amenazas del Gobierno central que han sido difíciles de digerir" en materias como la carne, el azúcar o las bebidas azucaradas.

En este sentido, Ruiz Aragoneses lamentó la "falta de visión a largo plazo" de los diferentes ejecutivos por su politización y por centrarse en "tres o cuatro años de legislatura", reclamando así unión a las fuerzas políticas "independientemente del color que sean" para "crear de verdad un proyecto en el que todos estuviéramos de acuerdo" con el Plan Agroindustrial, dada la "importancia que tiene el sector agroalimentario" en Castilla y León.

Flexibilidad ante la excesiva burocratización

Otra de las peticiones que en 'Los desayunos de Ical' trasladó Pedro Ruiz Aragoneses a los gobiernos nacional y autonómico es la flexibilidad ante una excesiva "burocratización" que "penaliza" a la empresa por la "visión criminal" de la misma, pensando "que va a defraudar".

Y es que, según el presidente de Vitartis, "hay muchas dificultades" ya en la propia elaboración de decretos que "llevan a cabo personas que no conocen la realidad empresarial" y que implica un descenso en la competitividad, cuando sus medidas se quieren poner en marcha, por la excesiva carga burocrática que soportan las empresas para acceder a las diferentes líneas de ayuda o de funcionamiento.

"Hay una parte de burocracia de la administración pública que tenemos que ser capaces de cambiar", reclamó Pedro Ruiz, poniendo como ejemplo la relación de Vitartis con Itacyl, una "herramienta maravillosa" pero a la que "falta visión a largo plazo" y que, a su juicio, está "infrautilizada e infravalorada" por la "traba burocrática" que hace que, a pesar de que cada nuevo equipo "tiene la intención de llevarlo a otro lugar, al final se llega al mismo sitio".

Recordó así que el objetivo de las administraciones públicas y de las personas que acceden a puestos de más responsabilidad "no es tener más poder, sino estar al servicio de los demás", y reiteró su petición de flexibilidad desde la perspectiva de "penalizar mucho a quien trata de aprovecharse", pero no a todo el sector con una excesiva burocratización que hace que "a veces paguen justos por pecadores".