La empresa propietaria de la plaza de toros Ribera del Duero, Toros Ricor, ha tramitado la solicitud de la licencia de apertura para el coso arandino, después de que el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León revocase la autorización de uso a finales de marzo (convirtiéndose en definitivo en mayo al no presentarse recursos). Hace unos días, la compañía movió ficha y entregó la documentación correspondiente en las oficinas del Ayuntamiento con el objetivo de que se pueda celebrar la feria taurina en las fiestas patronales en honor a la Virgen de las Viñas que tendrán lugar del 9 al 18 de septiembre.

Así lo confirma el empresario Pablo del Río, quien asegura que ahora están "a expensas" del Consistorio y, más concretamente, de que los técnicos municipales procedan a realizar la inspección final. "Lo que dijo la sentencia es que falta una inspección global. Las parciales no valen como una global aunque incluyan todas las secciones de la plaza", sostiene.

Por su parte, el concejal de Obras y Urbanismo del Ayuntamiento de Aranda de Duero, Alfonso Sanz, se limita a indicar que la empresa ha presentado "un documento visado con las obras que han realizado a fecha de hoy" y que "los técnicos tendrán que hacer una visita y verificar si es conforme a lo dicho".

Según Del Río, han presentado "todo lo que exige la normativa urbanística", incluyendo el mantenimiento y la renovación de certificados, entre otros. Por ejemplo, el plan contra incendios, que ha de actualizarse cada año; o la revisión del sistema eléctrico, cada cinco, y que llevaron a cabo en 2021 por lo que estaría vigente hasta 2026. En cualquier caso, recalca que no quedan mejoras pendientes ya que "en su día se dio viabilidad a todo".

El empresario confía en que el asunto "llegue a buen puerto tanto para nosotros como para que la gente de Aranda disfrute de las fiestas lo mejor posible". Sin embargo, el tiempo juega en su contra. A la falta de personal técnico en la Concejalía de Obras se suman las vacaciones de verano y la obligación de presentar los carteles con 45 días de antelación. Precisamente, Del Río avanza que ya tienen firmados los precontratos con toreros y ganaderías porque "sería imposible montar una feria en los dos fines de semana del año con más corridas en toda España".

No subirán los precios. No avanza nombres, sólo que serán figuras "codiciadas" y "unos carteles de nivel, como merece Aranda". En cuanto a los precios, aún no están definidos, pero desde Toros Ricor aseguran que mantendrán las tarifas de los abonos por las inciertas circunstancias económicas. Además, la empresa hablará con las peñas para conocer sus necesidades. Todo condicionado a la licencia de apertura. "No queda otra que esperar y que el Ayuntamiento nos diga cómo proceder", zanja Del Río.