Agentes de la Policía Local de Burgos han detenido a un varón que se autolesionó con un cuchillo y que había roto la orden de alejamiento de su pareja, además de que constaba sobre él una orden de prohibición y tenencia de armas.

Los hechos ocurrieron este domingo, a las 20.30 horas, cuando un aviso a la sala 112/092 de la Policía Local alertó de que un hombre había quebrantado la orden de alejamiento de su pareja.

Personados en las inmediaciones de la calle Romanceros, la patrulla de la Policía no observa nada, por lo que amplía la zona de búsqueda y poco después recibe otro aviso que alerta de que en el pasadizo de la calle Cervantes se encuentra un varón, supuestamente el que había quebrantado la orden de alejamiento, portando un cuchillo con intención de infringirse lesiones.

Los agentes se personan en el lugar y encuentran al hombre, que porta un cuchillo de 11 centímetros de hoja, con restos de sangre y con ademán de provocarse más heridas si los agentes se acercaban. Tras un periodo de negociación, finalmente arroja el cuchillo y es tratado en el lugar por el personal médico que había sido avisado por los policías.

Mientras se realizan las averiguaciones, salta una alarma en el sistema informático de los operadores de sala, en la que A.N.B., de 34 años, tiene en vigor una orden del juzgado de lo Penal 1 de Burgos de prohibición y tenencia de armas, por lo que se procede a su detención tras leerle sus derechos.